(Incluye video) El exdelantero pasó por LPM TV y reveló que para el partido entre el Millonario y Atlas pensó en ponerse el manto sagrado debajo de la indumentaria de su equipo. Además, comentó algunos detalles del abrazo que le dio a Ponzio y también su experiencia de compartir cancha con Ortega en el Fútbol Senior.
El pasado 15 de agosto, Wilson Severino emocionó a miles de riverplatenses en el estadio Martearena (Salta). Allí, el atacante ingresó en los minutos finales del partido que La Banda ganó 3-0 para despedirse del fútbol nada menos que contra el club de sus amores.
Luego de haber pisado el campo de juego, el delantero hizo lo que hubiera hecho cualquier hincha del Más Grande: abrazar a Leonardo Ponzio. En una entrevista con LPM TV, programa emitido por FWTV, Wilson comentó cómo fue aquel momento inolvidable.
“Me pasó que yo me decía ‘dale que entro, vamos’ y después estaba como una lady llorando, ja. Me ganaba el corazón. Lo abracé a Ponzio y después mucha gente me dice que hubiera hecho lo mismo”, recordó el goleador del ascenso.
“Yo quería que jueguen los aviones, no que juegue la 4ta División de River, ja. Tuve la suerte de que hayan jugado los mejores. Decí que a Ponzio lo agarré caminando antes de abrazarlo porque sino no lo agarraba más. No entré pensando en que lo iba a abrazar, surgió. Es el emblema, es el que cada vez que va a jugar al Monumental levanta a toda la gente cuando se tira al piso. Cuando River juega lindo y cuando tira una raspe, mete, engancha, se levanta entre tres y te despierta mucha energía”, añadió el exatacante.
A su vez, Severino confesó que estuvo muy cerca de cometer una locura: “Una de las locuras que pensé era que quería entrar con la camiseta de River abajo de la de Atlas. Yo quería eso. Tenía mi camiseta en el bolso, pero no sé por qué no me la puse”.
Pero, cómo fue que le surgió la idea de volver del retiro para jugar el último partido de su carrera frente al Millonario: “Uno pasó en el tren y me dijo: ‘Wilson, te retiraste y ahora juega Atlas contra River’. Baldazo de agua fría. Me miré gordo, despeinado y pensé ‘¿qué hago acá?’. Encima Atlas no me podía fichar porque el libro de pases estaba cerrado. River estaba jugando Copa y empezó a posponerse el partido. Entonces se abrió el libro de pases, hablé con el técnico y con el presidente”.
“Les dije que quería jugar y el DT, que es mi amigo, me dijo ‘vos tenés que jugar’. Me preguntó cuánto quería jugar, yo me miré y le dije ‘estoy para un minuto treinta, ja, con que me des cinco minutos ya estoy bien’. Con el presidente, otro amigo de Atlas, ningún problema. También sentí pena por un compañero que quedó afuera por mi entrada. La familia de él había viajado y le pedí disculpas por mi ingreso a la cancha, él tenía 22 años”, agregó.
+ MÁS DE SEVERINO:
La razón por la cual le pidió la camiseta a Maidana: “Yo soy 9, pero la presencia que él tiene… Te dan ganas de tirarte para los costados, le tenés mucho respeto. Yo juegué en canchas difíciles del ascenso, esas caras como las de Maidana las ves en el ascenso”.
¿Cómo se hizo hincha de River? “Pedro Astudillo, un jugador de bochas, me vio jugando al fútbol en el potrero y me dijo que me veía jugar bien. Me dijo ‘usted puede ser un gran jugador de fútbol pero para ser más grande tiene que ser Peronista e hincha de River’. Y me quedaron esas palabras. Él me hizo hincha de River. Mi mamá vendía camisetas de clubes y yo le pedía que me regalara el conjunto de River. Yo tenía 10 y 11 años y le robé una bolsa con la indumentaria. Era hermoso tener mi camiseta, pero la tenía que esconder para que no la viera mi mamá. Veía mucho a Ramón Díaz, el Mencho Medina Bello. Antes no veía tanto la tele porque en el barrio no se podía ver, el cable no llegaba a ese lugar, era ser hincha de los colores”.
¿A quién tenía como ídolo cuando era un niño? “Está en el potrero. Se llama Luis, le dicen “Bebé”. Nunca supo que él era mi ídolo. Pero en el potrero, llegar a la Primera del equipo del barrio, era lo máximo. Era un crack y no lo podían parar, yo aspiraba a jugar con él ahí. Era algo hermoso. Ahora cuando voy a Córdoba, él juega con los veteranos”.
Así surgió la chance de jugar en el Fútbol Senior: “Mario Argenta me llamó y me dijo que me vieron lo que me había pasado con River. Me dijo que sería un gusto para ellos que yo juegue ahí. Jugábamos contra Vélez y justo me tocó hacer un gol. El gol fue muy raro, ja. Es que Ortega metió un cambio de frente, yo estaba parado, la pelota me pegó en el pecho y se metió, ja”.
Todavía no cae en que tira paredes con Ortega en River Senior: “Se cambia ahí al lado y uno lo mira. No caigo. En un córner, yo estaba bajando y Ortega me dice ‘no, vos quedate que bajo yo’. Yo me remonto a mi niñez y mi vida, las cosas que uno pasó y de pronto estás con ellos. Lo de la gente de las provincias de River, de todos lados del país, es impresionante. Nunca entró el jugador a la cancha, entró el hincha”.
¿Alguna vez se enojó con Ortega en una situación de partido? “No hay chances de que me enoje con el Burrito. Juegan tan bien que te das cuenta de que yo corro 20 kilómetros y ellos solucionan todo en dos toques. Corro como loco, corro como si jugara con Atlas. Entreno todos los días y espero los lunes para jugar con ellos. Estoy orgulloso de ser hincha de River y que me pasen estas cosas”.
+ Mirá LPM TV todos los martes a las 21hs en vivo por FWTV