Si bien las imágenes y videos son un gran puente para recibir un mensaje,las palabras sonlas que logran desarrollar una idea mucho más amplia. Cuando se trata del Millonario,el periodista Andrés Burgo es uno de los indicados para transmitir en detallelo que significaRiver, el club de sus amores.
Autor de “Ser de River en las buenas y en las malas” y “La final de nuestras vidas”, entre sus obras riverplatenses más conocidas, Burgo presentó una nuevo libro que, sin dudas, da que hablar: “River para Félix”, de Editorial Planeta.
La Página Millonaria charló con Burgo y comentó de qué tratan estas304 páginas: “Es sobre la paternidad en un equipo de fútbol. Yo soy hincha de River por mi viejo Darío, que era hincha de River y quiero que mi hijo Félix (de 3 años) sea hincha de River. En la contratapa del libro están los tres carnets, el de mi viejo, el mío y el de mi hijo. El libro trata de lo que aprendimos con nuestros viejos en la cancha y la idea es tratar de pasárselo a nuestros hijos cuando vamos al Monumental. Hay una estadística informal que dice que 7 de cada 10 hinchas somos del equipo de fútbol de nuestro padre por influencia de ellos”.
Burgo encontró en River un puente para que -en lo afectivo- un padre pueda llegarle aún más a un hijo: “Tengo claro que el 100% quiere que nuestros hijos sean del equipo de uno. Entre otras cosas porque la cancha nos permiteun montón de demostraciones que, a veces, no hacemos porque no nos animamos a decir las palabras. El fútbol, muchas veces, ocupa lugares que son difíciles de ocupar en el resto de la sociedad. El fútbol, a veces, nos sirve para hacer cosas cuando las palabras no nos llegan. Son dos capítulos grandes. El primer capítulo trata sobre mi acercamiento a River gracias a mi viejo y cómo River empieza a ocupar un lugar súper importante en mi vida, en especial en mi adolescencia. Mi viejo era distante conmigo, pero el fútbol nos dio la posibilidad de acercarnos. Fue un puente. El segundo capítulo trata de que yo soy padre de mi hijo y trato de explicar qué es River para mí”.
