Como en San Juan, River se recuperó después de empezar por debajo en el marcador y, desde los doce pasos, logró vencer a Independiente Rivadavia, aunque el juego nuevamente quedó en deuda.

River salió a presionar desde el primer momento, con Ignacio Fernández y Ariel Rojas mordiendo en tres cuartos de cancha para no dejar respirar a Independiente Rivadavia en los primeros instantes y tomar la iniciativa.

Sin embargo, los primeros 10 minutos fueron de estudio para River, que controló la pelota e intentó, a través de los pies del Chino, llegar al área rival, aunque sin éxito. ¿Batalla? Espectador de lujo en el arranque.

Recién sobre el cuarto de hora logró el Millonario llegar al arco rival mediante un tiro libre de Gonzalo Martínez que Sebastián Driussi conectó de cabeza. El remate del delantero cruzó el área chica y salió a centímetros del palo.

La respuesta de Independiente Rivadavia llegó a los 20 minutos con un tiro libre frontal en el que Rodríguez le ganó a la defensa millonaria y cabeceó muy cerca del palo izquierdo de Batalla.

Al instante, un corner ejecutado por el Pity encontró a Lucas Martínez Quarta, quien le ganó al arquero rival en el salto, pero la pelota le dio en el hombro y salió por encima del travesaño. En la jugada siguiente, Rodrigo Mora también recibió un gran centro del 10, pero su cabezazo se fue elevado.

A los 34 se encontraron Martínez y Mora, aprovecharon que Driussi arrastró marcas, tiraron una pared y el uruguayo, de zurda, estuvo a punto de abrir el marcador, aunque el arquero de la Lepra mendocina le negó el grito.

Pero la más clara llegó a los 36, porque el Pity -figura excluyente en la primera mitad- le puso un pase en profundidad perfecto a Milton Casco, quien quedó mano a mano y definió cruzado de derecha, aunque Aracena le contuvo el remate.

Batalla recién tuvo que esforzarse a los 41 minutos, cuando Curuchet aprovechó una mini siesta de la defensa, ingresó al área por el costado derecho y sacó un centro-remate que el arquero riverplatense despejó sin problemas.

En el complemento, Independiente Rivadavia trató de imitar lo hecho por River y comenzó con una presión alta que derivó en dos tiros de esquina antes de los 5 minutos, con un Millonario dubitativo y errático. Sosa, a los 7, llegó en un contragolpe hasta el borde del área, pero su remate fue bien controlado por Batalla.

Y, como tantas veces en el último año, la siesta tuvo un caro costo para River, porque Sosa se tomó revancha y a los 17 minutos del complemento quedó cara a cara con el uno millonario y no perdonó. 0-1 y a remar desde abajo contra la Lepra, que se quedó con uno menos porque el goleador se sacó la camiseta y ya estaba amonestado.

Automáticamente, La Banda comenzó a apretar e Independiente Rivadavia se replegó en su área. La lluvia torrencial no ayudó al Millonario, que comenzó a buscar por vía aérea, con el ingreso de Marcelo Larrondo por Jonatan Maidana. A los 28, el Pity sacudió al Malvinas Argentinas con un zurdazo bárbaro que el arquero rival mandó al tiro de esquina.

De ese corner llegó el empate, gracias al recién ingresado Carlos Auzqui, quien la metió en la primera que tocó. Pero la alegría duró un instante, ya que el local tuvo un mano a mano segundos después. Afortunadamente, Ponzio se barrió cuando Batalla ya estaba vencido y le ahogó el grito a los mendocinos.

Faltando apenas cuatro minutos, Auzqui se escapó por derecha, mandó un buen centro para Larrondo y el delantero, producto de la lluvia y quizás la inactividad, tardó en darse vuelta y le dio muy desviado, pese a estar a un metro del área chica. Una chance inmejorable.

Se terminó el partido y los penales volvieron a definir la historia. Augusto Batalla le contuvo el remate a Encina, primer pateador local. Y, como River metió los cinco suyos -Nacho, Ponzio, Auzqui, Mora y Larrondo-, festejó en Mendoza. Pero queda mucho por mejorar para realmente ilusionarse.

+ VIDEO: La tanda de penales:

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+ GOLES: Los tantos en Mendoza.

+ FOTOS: Las imágenes del amistoso.