Marcelo Gallardo consiguió algo que es difícil de dimensionar en la actualidad, deberá pasar tiempo para valorar lo importante que es el hecho que luego de caer por 3 a 0 en un partido de ida de una semifinal de Copa Libertadores, él sólo haya sido capaz de hacer creer a millones de hinchas de River que la posibilidad de dar vuelta el resultado y jugar una nueva final de Copa  era posible. Más allá del resultado obtenido en Brasil contra Palmeiras, el valor del triunfo –aunque haya sido eliminación- es que los hinchas se vieron reflejados en un equipo que jugó como si no hubiese un mañana, con el compromiso necesario para demostrar que pese a no jugar la final River es el mejor equipo del continente.

Al finalizar el partido no hubo reproches, no podía haberlos. No se podía criticar a un equipo que jugó de esa manera y mucho menos a un entrenador que hizo una lectura perfecta del partido, que ató de pies y manos a uno de los mejores equipos de continente y que a lo largo de los 100 minutos que duró el partido fue ampliamente superior. Los hinchas lo reconocieron en las redes sociales, pero también los familiares más cercanos del Muñeco que se expresaron y manifestaron el orgullo que sienten por el Muñeco.

Máximo es su papá y le agradeció a Marcelo por “hacerlo sentir el padre más orgulloso del mundo”, también su hermana Marta compartió una historia en Instagram donde aseguraba: “Orgullo de tenerte y orgullo de ser de River… Te amo hermano.. sos el mejor siempre”. Dos de sus hijos también hicieron lo propio, Matías –habitual alcanzapelotas en los partidos que River juega como local- y Santino se manifestaron en la misma línea que su abuela y su tía.