Gallardo apunta los cañones a Iván Alonso, de 36 años, pero antes la dirigencia realizó gestiones a fondo por Scocco y sondeó varios nombres que resultaron imposibles por las elevadas cotizaciones.
El fútbol, más allá del juego, los sistemas tácticos y diferentes estrategias, se resuelve mediante goles. Verdad de perogrullo, es cierto, aunque no por eso para dejar de recalcar en determinados momentos. Por eso los goleadores, en general, son más caros que el resto de los jugadores de campo.
Y, justamente, la obsesión de River es un 9. Desechadas las opciones por Ignacio Scocco, debido a que no hubo acuerdo económico con Newell’s Old Boys, se manejaron otros apellidos. Ramón “Wanchope” Ábila, de gran 2015 en Huracán, fue analizado, pero quedó fuera de carrera. Otros puntas resultaron inaccesibles por sus respectivas cotizaciones y situaciones deportivas.
¿Los candidatos que salieron de competencia enseguida? Desde Radamel Falcao, cuyo presente lesionado lo hace imposible, hasta Marco Ruben, cuando Rosario Central tuvo inconvenientes para adquirir el pase. Tampoco hubo éxito con Germán Denis, que busca salida de Atalanta. Mauro Boselli, una vez más, estuvo lejos porque León pretende mucho dinero por él.
Pese a que hubo un llamado de Teo a Gallardo, Gutiérrez quedó descartado
Entonces, bajo ese panorama dificultoso, surgió la opción mediática de Teófilo Gutiérrez. Su flamante representante inició una operación de prensa y el propio jugador aprovechó públicamente para deslizar su deseo de retornar a Núñez. Incluso ayer se comunicó con Marcelo Gallardo. Sin embargo, no seduce al técnico ni a la dirigencia por todo lo que viene acompañado su combo, más allá de que Sporting de Lisboa tiene que seguir pagándole el pase a River.
Luego de tantos delanteros mencionados y evaluados, Iván Alonso aparece como el señalado por el Muñeco. A los 36 años -cumplirá 37 en abril- es figura en Nacional de Montevideo. Goleador del fútbol uruguayo durante el 2015, Gallardo lo conoce de El Bolso. Y ya charló con él. El club charrúa no quiere desprenderse del atacante, pero tampoco ve con malos ojos una negociación por un artillero veterano, cuya posibilidad de reventa se presentaba inviable. Aunque la obsesión por un 9 todo lo puede en Figueroa Alcorta 7597.
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