logotipo del encabezado

La imaginación prohibida

¿Qué se puede decir de un clavo? Que es práctico, que sirve para reparar algo roto y punto. ¿Que es lindo? No. Que es malo, tampoco. Que es feo, sí. Y eso volvió a ser River en Floresta, un clavo. Un equipo feo, que tiene un técnico que es buen tip

pablo-desimone
0

¿Qué se puede decir de un clavo? Que es práctico, que sirve para reparar algo roto ypunto. ¿Que es lindo? No. Que es malo, tampoco. Que es feo, sí. Y eso volvió a serRiver en Floresta, un clavo. Un equipo feo, que tiene un técnico que es buen tipo, quees hincha de River y que se le cayeron muchos soldados, pero ojo, ningún Che Guevara,Espartaco, Wallace, Artigas ni San Martín. Ningún Kung Fu, ya que estamos en elterreno del Samurai.

Ninguno que cambie la ecuación, que le dé un plus técnico a la táctica elegida, que le pueda sacudir la modorra. ¿Que no lo tiene? Puede ser, pero lo que no se hace se compra hecho. No se pide que Almeyda saque agua de las pìedras ni que produzca milagros. Sino que la dirigencia haga algún aporte a la imaginación. Que aproveche el hospital de campaña, al que ahora se le suma la baja de Ponzio -pésimamente expulsado por el fantoche de Beligoy- y busque afuera lo que Matías no encuentra en su plantel.

¿O es que está prohibido buscar un jugador que le dé el salto cualitativo que el equipo no encuentra? ¿Es que no hay un morlaco y nadie lo dice? ¿Cuál es el plan de acá a fin del campeonato? Baja una indiferencia comunicativa preocupante… ¿Cuáles son los motivos para que el juego de River sea más plomo que bailar con una hermana? Necesitamos golosinas urgente. No se puede aburrir más al hincha.

Publicidad

En busca del equilibrio se perdió agresividad. Y antes fue al revés. Este River tiene la capacidad de generar tantos cambios de estados de ánimo como de esquemas tácticos. Ahora River se aferró al 4-4-2, sistema que le dio rédito en aquellas dos goleadas consecutivas. Apartir de allí, lo que pareció un paso seguro, vuelve a generar incertidumbre. El mástil de un barco a la deriva al que River le clavó las uñas, ya se astilló y muestra otras fisuras.

Le pasó contra Quilmes, regaló la victoria frente a Boca y careció de creatividad frente a un equipo plagado de exriverplatenses que nos prepotean y juegan con bronca encima (Coronel, Ahumada, y el Pato Toranzo). Volvió esa sensación de impotencia. Esa que va corrigiendo los problemas de atrás para adelante pero que se aleja del gol tanto como la cumbre del Himalaya. Pezzella fue el mejor y a partir de él la pelota que circuló por los laterales y el doble cinco bastante limpita. Martínez, correcto en la marca y la salida. Sánchez, otro que viene en alza, explotando bien la franja derecha. Algunos chispazos de Funes Mori al principio. Y Mora, que si no se levanta bién, no nos salva ni el Chapulín Colorado. Una sola de Rojas para rescatar, poco muy poco, después del golpazo del domingo.

Y el primer tiempo que se fue aguardando que alguién rompa el cascarón y el partido nazca en serio. Nada de eso, All Boys metió la cola atrás y jugó sus cartas al pelotazo salvador y algún cabezazo. Ni eso para inquietarnos. Excepto el recurrente error de Bottinelli, de todos los partidos que casi nos cuesta caro. Mientras tanto, se busca cambiar la intrascendencia de Rojas por izquierda por las gambetas del Keko. Tarde, hasta para que salga la Luna. En fin:

Publicidad

Todos cumplieron, hicieron su trabajo. Se bañaron, se lavaron los dientes, se pusieronla corbata, el traje más livianito por el calor, camisa al tono. Desayuno Light. Y a cumplir horario con la oficina. Todos regularcitos, ninguno que se rebele, que invente algo, que se anime a caminar sobre los clavos, aun a riesgo de lastimarse.

Ninguna que rompa el aburguesamiento y la resignación del sueldo fijo a fin de mes y quiera más. Que se suba a la silla y pegue un par de gritos: ¡Vamos a despertar, carajo! Puta, ya rajamos al Chori y a Cavenaghi, David está con problemas y lo extrañamos. Hagan algo por esa gente que está ahí afuera. Por medio país que se arruina los domingos esperando una alegría.

¡Oigan viejo, esto es River! ¡Puta que vale la pena jugar en River! Hagan algo más que mirar los promedios. Aflojen con el miedo. Hablen, comuniquen.¡Basta de poner cara de poker! No alcanza con la épica del aguante. Hacen falta decisiones institucionales que jerarquicen este plantel. El aburrimiento tiene un límite. Exprímanse el cerebro y los bolsillos. Si hay algo que no trafica el hincha de River es que le quieran “prohibir la imaginación”. Levantar los pies de la tierra, puede servir para reaprender a volar y buscar la gloria. No esperen que vuelva sola, sin mover un dedo.

Publicidad

Vienen tres partidos accesibles en una semana, no se duerman en los laureles. Ayudena River. Se necesitan puntos pero por sobre todo ideas. Grandeza, sueños, rebeldía, ideales, algo que al equipo de Matías necesita de manera urgente. Construir con clavos esa escalera al cielo del fútbol de una vez por todas. Maderas sobran. Aliento también.

    Lee también
    Recibe las últimas noticias en tu casilla de E-mail

    Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones

    Better Collective Logo

    EL JUEGO COMPULSIVO ES PERJUDICIAL PARA VOS Y TU FAMILIA, Línea gratuita de orientación al jugador problemático: Buenos Aires Provincia 0800-444-4000, Buenos Aires Ciudad 0800-666-6006

    La aceptación de una de las ofertas presentadas en esta página puede dar lugar a un pago a La Página Millonaria. Este pago puede influir en cómo y dónde aparecen los operadores de juego en la página y en el orden en que aparecen, pero no influye en nuestras evaluaciones.

    Better Collective Logo