Hay jugadores que no claudican con nada, tanto dentro como fuera de la cancha, y se plantan sobre su corazón a la hora de afrontar las adversidades. Y uno de los ejemplos más claros de lo anteriormente mencionado es Javier Pinola. El marcador central de 38 años sufrió en febrero una dura lesión cuando producto de una mala caída se fracturó el antebrazo derecho, sin embargo eso no fue un camino hacia la resignación y a pensar en colgar los botines. 

"Después de la lesión contra Platense nunca se me pasó por la cabeza retirarme ni tirar la toalla. Al contrario, era un lindo desafío personal que tenía por delante. El volver a recuperarme, el volver a ayudar a mis compañeros desde el lugar que me tocara. Uno no puede renunciar y terminar su carrera de esa forma", sostuvo Pinola en diálogo con la Liga Profesional.

Además habló sobre su rol específico dentro del vestuario, y la importancia de ser una contención para los más jovenes del plantel. "Intento aconsejar a los más jóvenes sin agobiarlos, porque creo que cuanta más información en menos tiempo les das, por ahí les puedo producir un poco de duda. Es cada día ir aportando un poquito mas. Muchas veces prefiero que si ellos tienen dudas, se acerquen a mí. Tienen confianza total para preguntarme y hablar conmigo. Yo tengo que predicar con el ejemplo y de ahi ellos van sumando"