Ariel Arnaldo Ortega cumple 41 años y una vida dedicada a River. El Burrito supo ganarse al hincha y quedar en la historia como uno de los mejores futbolistas jamás vistos en Núñez. Repasá su increíble trayectoria con La Banda.
“El error más grande de mi carrera fue irme de River. Donde más feliz fui y soy es en River. Son errores que uno comete. Si pudiera empezar otra vez mi carrera, no me voy más. River es lo más lindo del mundo”.
Ariel Arnaldo Ortega siempre tuvo bien claro lo que significa vestir el manto sagrado. Desde su aparición en Primera, aquel 14 de diciembre de 1991 contra Platense, el oriundo de Ledesma entendió perfectamente cómo debía representar al Más Grande.
Quizás por eso desde un principio haya sido de los preferidos de la gente. Su gambeta endiablada, sus inexplicables quiebres de cadera, sus amagues para un lado y para el otro, que mareaban a rivales y a las mismas tribunas, lo convirtieron en una de las figuras del equipo más ganador del club.
“Me encanta sentir ese vientito de la pierna del jugador rival cuando lo gambeteo. Si me preguntan como quién me gustaría jugar, contestaría como yo, como Ortega. Le agradezco a Dios por haber hecho que juegue así. No le envidio nada a nadie”, dijo años más tarde. Y sí, Chango, cuánta razón tenés.
Tuvo 4 pasos por River: el primero, de 1991 a 1996, fue impresionante, porque ganó 4 Torneos Apertura (’91, ’93, ’94 y ’96) más la histórica Copa Libertadores de 1996. Se iría a Europa, pero volvería a mediados de 2000 para integrar “Los cuatro fantásticos”, junto a Pablo Aimar, Javier Saviola y Juan Pablo Ángel. Antes de irse a Turquía le dio otra alegría a la gente y ganó el Clausura 2002.
Fue duro verlo con la camiseta de Newell’s. Jamás quiso gritarle los goles a River. “Sabía que muchos me iban a decir ‘fracasado’, pero volvería a River 100 veces más. Soy más feliz que en cualquier otro lado”, dijo antes de cumplir su sueño y tener un tercer ciclo con La Banda. Ah, por si fuera poco, en ese paso ganó el Clausura 2008.
Su cuarto paso fue el único en el que no ganó títulos, y la dirigencia de aquel entonces, liderada por Daniel Passarella, decidió dejarlo ir a fines de 2010. Lo que pasó en 2011 es historia conocida para todos. Ortega estaba lejos de Núñez y no pudo dar una mano. Sus números con La Banda lo dicen todo: 357 partidos, 78 goles, 6 títulos locales y una Libertadores.
Y el 13 de julio de 2013 tuvo el privilegio que sólo tuvieron eminencias como Norberto Alonso y Enzo Francescoli. El Monumental se llenó para saludar por última vez dentro de la cancha al enorme jujeño en su partido despedida. “Gracias Dios por hacerme hincha de River”, alcanzó a decir antes de que las lágrimas le impidieran seguir hablando.
Por eso, este 4 de marzo, en su cumpleaños número 41, y mientras forma parte del cuerpo técnico de la Reserva campeona, todo el Mundo River lo saluda. Ariel, Burro, Burrito, Chango, Orteguita o simplemente Ortega. Le podés decir como quieras, pero todos compartimos el mismo sentimiento de devoción por este crack sin fecha de vencimiento. ¡Feliz cumple, JuGenio!
+ Los mejores goles de Ortega en River.
+ Fotos: El partido despedida del Burro en el Monumental.
+ El Chango, uno de los regresos más significativos de la historia.
+ Fotos: Los trapos dedicados al ídolo.
+ Ortega, uno de los máximos verdugos de Boca.
+ El Burro, autor de los mejores goles al eterno rival.
+ El Jujeño fue también una de las compras más caras del club.
+ Ortega, figura de varios Superclásicos inolvidables.
+ Así se definió el Clausura 2008, con la magia del Burro.
