Es muy probable que en cada fecha de la Liga de España haya varios hinchas de River prendidos al televisor para mirar los partidos del Sevilla. ¿Por qué? En el equipo andaluz se encuentran varios jugadores que pasaron por el Millonario y todos ellos muy queridos: Erik Lamela, Lucas Ocampos y Gonzalo Montiel, flamante incorporación del último mercado de pases. Cachete la rompió la semana pasada en su primer partido como titular -marcó un gol- pero su buen momento no solo se debe al talento que tiene incorporado sino también a la ayuda que recibió para acortar los tiempos de adaptación a la nueva camiseta.

Lucas Ocampos, formado en las Inferiores de River y pieza fundamental del equipo que logró el ascenso en 2011, defiende los colores del Sevilla hace más de dos años y ya es todo un referente al momento de incorporar jugadores al vestuario: "A Coco (Lamela) y a Cachete (Montiel) los conocía ya de River y de la Selección; a Papu (Gómez) lo mismo. Fue muy fácil que se adapten al grupo y el grupo los aceptó rápidamente porque son personas excelentes. Me tocó hacer de referente por primera vez con un argentino y creo que lo hice bien", expresó en una entrevista con Goal.

Ocampos jugó 40 partidos con la banda roja y fue vendido al Mónaco de Francia a mediados de 2012 por la irrechazable suma de 16 millones de euros. Desde entonces, pasó por el Olympique de Marsella, Genoa y Milan de Italia y actualmente está en el Sevilla, donde tiene la misión junto a sus compatriotas riverplatenses de llevar al equipo español lo más lejos posible en la Champions League -hoy enfrentan al Wolfsburgo por la fase de grupos-.