"Cuando Juanfer metió el 2-1 medio que nos enloquecimos, hubo una desorganización total, corríamos para cualquier lado y no definíamos las que teníamos para definir. Yo gritaba como loco, también Jony (Maidana) y Javi (Pinola); Franco (Armani) estaba afónico, es otro que siempre ordena muchísimo". Nada hacía pensar en que llegaría un momento legendario en la historia de River. Al menos, Enzo Pérez no lo tenía en su cabeza.

En diálogo con La Nación, el volante de River contó detalles del gol de Martínez para decretar el mítico 3-1 en la final jugada ante Boca (por la Copa Libertadors y en el estadio Santiago Bernabéu): "Yo les decía a Juanfer y al Pity que había que mover la pelota de un lado a otro porque ellos estaban desorganizados, algo lógico, a nosotros también nos hubiera pasado, pero bueno, era demasiada la tensión. Si nos hubieran empatado, era para matarse. Pero por suerte apareció el loco este y lo definió".

Y también, el 24 del Más Grande confesó qué fue lo que circuló por su mente en ese lapso hacia la gloria eterna: "Nada, ¿qué voy a pensar? "Hacelo, hacelo", eso se me pasaba por la cabeza. Cuando después miré el video desde arriba, vi una locura de todos corriendo para todos lados apenas entró la pelota. Yo me fui para el costado, donde estaban mis hijos, mi repre y mi mujer, justo arriba del banco de River".

"Enseguida terminó y le hice la seña a mi repre de que me pasara a mis nenes, y cuando los estaba agarrando uno de seguridad me puso el brazo y me dijo que no podía pasar. ¡Qué no va a poder pasar! Le saqué el brazo, los alcé a los dos y los hice entrar al campo. Fijate que fueron los únicos dos chicos que festejaron en el campo con nosotros. Después subí al podio saltando y moviendo los brazos como si estuviera en una fiesta de casamiento, ja", agregó Enzo. Hincha de River, claro está.

Su agradecimiento eterno hacia Gallardo y la dirigencia: "A Marcelo le di un abrazo y le agradecí por haberme traído; también al presidente y a Enzo, y les dije lo mismo. A Marcelo me le había tirado encima cuando ganamos la Supercopa en Mendoza: aquella vez, apenas pitaron el final, Marcelo giró y los que estábamos afuera entramos corriendo, y yo me le trepé encima, y le dije unas palabras que no te voy a repetir, pero fue muy lindo".

La foto con Francescoli: "Lo traje y le dije: "Vení que tenemos que hacer una foto" y el Polaco (Haliasz) la sacó. Enzo es re-vergonzoso, ahora está más suelto, los dos estamos más sueltos, y solemos hablar antes de los partidos, cuando viene a la concentración. Yo lo bromeo por la ropa, le digo que se tiene que modernizar un poco".

 

"Siempre pensé que no hay favoritos en un River-Boca, y tampoco creo que importe mucho cómo venga uno o el otro. Son partidos distintos a los demás, partidos de máxima concentración y que se terminan definiendo por detalles. En casa hicimos un gran partido y sacamos una ventaja importante, pero no definitiva. Sé que la vamos a tener difícil allá, pero iremos a ganar, como siempre, porque Marcelo nos pide no relajarnos, ir a buscar el arco rival para abrir los partidos lo más rápido posible. Falta el 50 por ciento de la serie".