River está prácticamente listo para jugar la final de la Copa Libertadores contra Flamengo. Tan sólo le resta una práctica antes del duelo decisivo. Pero lejos de vivir horas de nerviosismo, los jugadores mostraron un clima de absoluta serenidad durante la tarde de hoy.
El plantel se entrenó en la cálida jornada de la capital de Perú, donde el escenario para el entrenamiento fue la cancha de Alianza Lima. Ubicada en el barrio La Victoria, sirvió para que Marcelo Gallardo pudiera hacer la penúltima evaluación previa a la búsqueda del bicampeonato continental.
Menos de media hora fue el tiempo permitido para que los medios acreditados, tal es el caso de La Página Millonaria, pudieran registrar las acciones. Hasta el momento de la salida se vio algo muy marcado: un optimismo enorme de los futbolistas, producto de la serenidad para trabajar.
Al principio, el Muñeco optó por una charla de cinco minutos, aproximadamente, con sus dirigidos y el cuerpo técnico. Posteriormente, hubo dos grupos de tareas: los arqueros se ejercitaron cerca de la popular que habitualmente utilizan los hinchas del club local, mientras que el resto hizo un 'loco' en la zona del círculo central.
En ese contexto, los jugadores dejaron en claro que estaban distendidos en la medida justa y necesaria, entusiasmados por otra final. Las bromas estuvieron presentes. Desde un pelotazo de Nicolás De La Cruz a Lucas Pratto con devolución mediante un golpe sano hasta la cuenta a Lucas Martínez Quarta cuando hacía jueguito, pasando por las palmas para acompañar una situación graciosa. Así está River en Perú, preparado para darle otra alegría a sus hinchas.
