El Millonario fue muchísimo más que Estudiantes, pero no lo liquidó y a tres minutos del final le empataron. Sin embargo, un ¿tiro al arco? del Pity Martínez le dio a La Banda una victoria fundamental para mantener la ilusión en el certamen más importante del semestre.

Sin Andrés D’Alessandro, ausente por gastroenterocolitis, el Millonario depositó el juego en Gonzalo Martínez y Tomás Andrade, quienes de entrada se pararon sobre las bandas para lastimar con diagonales.

Y a los 5 minutos, Andrade tuvo el primero. Tras un buen pivoteo de Lucas Alario, el pibe amagó, dejó en el camino a dos rivales y quedó mano a mano, pero el arquero rival le contuvo el zurdazo.

Estudiantes quedó agazapado en su campo y le cedió el control de la pelota al Más Grande, que intentó lastimar de afuera hacia adentro, con los volantes externos sumados a la dupla de ataque.

Sin embargo, pasaron los minutos y la presión de La Banda sobre el equipo de la Primera B Nacional fue disminuyendo. Si bien River no sufrió, dejó de asediar a Estudiantes, que hizo su juego e intentó consumir más tiempo.

Hasta que, cerca de la media hora, una enorme jugada colectiva encontró a Milton Casco en “posición de Alario” -el Pipa lo asistió- y quedó cara a cara con el arquero. Pero el lateral definió mal y la pelota salió desviada.

Y cuando comenzaban a aparecer las dudas, Ignacio Fernández agarró la pelota en tres cuartos de cancha, se perfiló y sacó un zurdazo bárbaro que, con algo de complicidad del arquero de Estudiantes, significó el 1 a 0 en Salta.

Antes del entretiempo, Jonatan Maidana – cumplió 200 partidos oficiales en River– estuvo a centímetros de ampliar la ventaja, luego de un gran centro de Nacho que no pudo conectar con la cabeza.

En la primera jugada del complemento, otra buena combinación entre el Pipa y Casco terminó en un muy buen centro rasante del lateral que encontró a Alario a punto de meter el segundo, aunque justo le taparon el remate.

Era todo de River, pero una mala salida de Augusto Batalla con los pies derivó en la primnera jugada de peligro de Estudiantes, que agarró a la defensa millonaria mal parada y, de cabeza, estuvo muy cerca de la igualdad.

En un minuto, Alario tuvo otras dos jugadas, ambas mano a mano. Primero la picó y salió a milímetros del palo. Luego, esquivó al arquero y definió en el costado del área chica. Pero nuevamente le faltó un toque de suerte para poner el 2 a 0.

Ingresó Rodrigo Mora por Andrade para sumarse al ataque y a los sesenta segundos descolocó a la defensa rival con un buen derechazo que el arquero controló en dos tiempos.

Pero River no lo liquidó y, a tres minutos del final, Estudiantes llegó a un empate totalmente inmerecido que hizo tambalear el sueño de La Banda en la Copa Argentina.

Hasta que, en tiempo cumplido, Gonzalo Martínez recibió una falta y ejecutó un tiro libre que, según sus propias palabras, fue un intento de centro, pero se metió en el ángulo e hizo estallar a todo el Padre Martearena.

Llegó el final y el desahogo. River superó una nueva instancia y la Copa Argentina ingresa en las etapas definitorias. No hay margen de error y el plantel lo sabe, pero se ilusiona. Y por qué no, la gente también sueña. Con el título y la Libertadores. Vale soñar.

+ FOTOS: Las imágenes del encuentro en Salta.

+ GOLES: Del grito de Nacho Fernández a la explosión con el Pity.

+ DORSALES: ¿Qué número usará cada jugador este año?