El rendimiento de River en el primer amistoso de la pretemporada dejó mucho que desear, pero el operativo de seguridad del encuentro no se quedó atrás. El árbitro suspendió las acciones a 10 minutos del final por el humo de las bengalas arrojadas por la hinchada de América de Cali.
Después del penal convertido por Cristian Borja que selló el 3 a 1 para el conjunto colombiano, el partido ya no se reanudaría. Faltaban 10 minutos para llegar al tiempo reglamentario. Sin embargo, el humo de las bengalas que cayeron detrás del arco de Sebastián Fuentes hizo imposible que se pudiera jugar.
La Página Millonaria, presente en Fort Lauderdale, fue testigo del papelón que cerró el amistoso y del pésimo operativo de seguridad que permitió que eso fuera posible. En primer lugar, llamó enormemente la atención la falta de controles en el ingreso al estadio. Cualquiera hubiera podido ingresar lo que hubiera querido al estadio Lockhart.
A su vez, fue prácticamente nula la presencia policial dentro de la cancha y las tribunas, lo que dio lugar a la invasión de varios inadaptados de América de Cali al campo de juego. Teniendo en cuenta estos datos, no sorprende tanto el desenlace, incluso estando en un país como Estados Unidos.
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