En horas de la tarde del jueves, luego de que River consiguiera el pase a la final de la Copa Libertadores en La Bombonera, nos enteramos de la suerte con la que corrió el empleado de seguridad que corrió a abrazarse con los futbolistas del Millo. Néstor Gabriel Portillo, hasta hoy persona de seguridad en la agencia PCP, fue despedido por el simple hecho de ser pasional.

Y en diálogo con LPM TV, por FWTV, Néstor confesó cuáles fueron los motivos que ocasionaron su despido: "Me echaron porque me abracé con Pratto y Suárez. La alegría no me la va a quitar nadie, hay que seguir adelante. Tengo una familia, tengo que conseguir otro laburo. La mano está jodida".

 

Portillo, quien aún está buscando un nuevo empleo y facilitó su cuenta de Twitter para ser contactado, reveló textuales de la charla que mantuvo con sus superiores en la previa a su cese de actividades: "Cuando me abrazo con los dos jugadores, me manda en cana Arévalo (un gaucho bárbaro) y me llama un supervisor a la base de Boca. Me dicen: '¿Qué pasó? Me abracé con los jugadores'. Me dijeron que eso no se podía hacer".

"Somos seres humanos, es una acción. Salió otro y me dijo 'a la una de la tarde andá a la empresa'. Cuando fui, el flaco que me atiende me dice '¿vos te das cuenta de lo que hiciste? Vos sos un profesional'", aseguró el damnificado, quien agregó cuál fue el detonante en esta situación.

"'¿Vos viste la repercusión que tuvo esto? Boca quiere que te echemos'", fueron las palabras de uno de sus jefes en la empresa. "Fuimos a la oficina y me dijo: 'vos incitaste a la violencia, le hiciste burlas a Buffarini y a los periodistas'. Yo sólo abracé a Pratto y a Suárez, no me crucé con nadie, no hablé con nadie y fui a la base a trabajar", sentenció.