Siempre supimos que River es mucho más que un club de fútbol. Es una manera de vivir, de sentir, de manifestarse ante un mundo que muchas veces se torna adverso. En la pasión por los colores hallamos ese tesoro que se llama felicidad, y así fue el caso de Santi. ¿Quién es él? Un pequeño guerrero de siete años que superó una traumática situación con la que tuvo que lidiar.
Un hombre, vecino de este chico, abusó brutalmente de él y fue el propio violador quien se entregó a la justicia (razón por la que, afortunadamente, este depravado está privado de su libertad). Pero la vida de Santi no fue para nada fácil durante y luego de estos aberrantes sucesos. Sin embargo, en las últimas horas vivió una jornada que nunca olvidará gracias al club del cual es hincha.
Sí, River lo hizo reir y surgir ganas de volver a empezar. Ahora Santi quiere leer y escribir, quiere aprender esos recursos que por la desdicha de un degenerado nunca pudo llevar a cabo. Busca focalizarse en su vida y crecer como un niño feliz. Como lo que merece.
Rodrigo Mora fue a conocer a este chiquitín que ya quiere tener en sus manos todos los libros de River en donde se hable del uruguayo y se fotografió junto a quien se ha convertido en su ídolo de toda la vida… ¡Salud, Santi!