Se avecina una semana larga y tediosa para River después de ser derrotado por Sarmiento en el Estadio Monumental. Para los jugadores serán días de mucha exigencia en los entrenamientos y para los hinchas atravesar una especie de suplicio hasta volver a ver jugar al equipo. Porque la ilusión de poder revertir la mala imagen mostrada en el último partido hace que los días se hagan más largos de lo deseado hasta que River vuelva a saltar a la cancha.

Y eso será el domingo 7 de agosto a las 20.30 ante Independiente en el Estadio Libertadores de América, o al menos eso es lo pactado. Por la frágil situación social e institucional que atraviesa el club de Avellaneda, con un repudio generalizado hacia la actual dirigencia comandada por Pablo Moyano y disturbios en las afueras del estadio en la última asamblea, la Aprevide podría decidir que el partido se juegue sin publico o incluso en otro lugar.

 

De hecho, esto último ya ocurrió. La fecha pasada, Independiente enfrentó a Atlético Tucumán el domingo a la mañana en cancha de Platense cuando debería haberlo hecho el sábado por la noche en su cancha. Los organismos de seguridad ponen todos sus ojos en el comportamiendo de los hinchas del Rojo, en estado de ebullición ante la inminente salida de los dirigentes actuales, y por eso este martes habrá una reunión entre Aprevide y Sergio Berni, Ministro de Seguridad, donde se confirmará día, horario, sede y público del partido por la fecha 12 de la Liga Profesional.

En principio, el encuentro no sufriría un cambio de sede, aunque sí podría jugarse sin público por la situación antes mencionada. Todo quedará definido en el cónclave de las próximas horas. Mientras, Marcelo Gallardo empezará a preparar (y tratar de mejorar) los aspectos futbolísticos del equipo, que va a reencontrarse a las 11 de la mañana en el River Camp para iniciar la semana de trabajo.