Cristian Nasuti tuvo una gran carrera como futbolista, vistió la camiseta de equipos importantes y sin dudas que dejó un grato recuerdo en el hincha de River que veía en él un marcador central aguerrido y que siempre rindió, inclusiveteniendo como compañeros a extraordinarios defensores, el Tano logró hacerse un lugar. El oriundo de San Martín, que debutó en Platense y llegó a River para terminar de formarse en la Reserva tuvo dos pasos por Núñez (2002-2004 y 2006-2008) en los que ganó los Clausura de 2004 y de 2008.
En una entrevista concedida a La Página Millonaria, el marcador central recordó su llegada a Núñez, destacó a un compañero del que aprendió mucho, se refirió a Marcelo Gallardo y la importancia de su liderazgo tanto dentro como fuera de la cancha y también contó cómo son sus días dirigiendo a un equipo de las juveniles del Lorca FC en España y también la ayuda que le brinda a algunos deportistas profesionales para que estén organizados de la mejor manera posible una vez que dejen la actividad profesional.
El Tano junto a Eduardo Tuzzio.
¿Cómo fue llegar a River desde Platense?
Fue un paso muy grande en mi carrera, estaba en mi comienzo como profesional en Platense y apareció la oportunidad de ir a River, de empezar a competir en Reserva y ganarme un lugar. Fue muy lindo y motivante, la idea era prepararse bien para vivir ese momento de la mejor forma y aprovecharlo, por suerte las cosas se fueron dando de a poco.
¿Cuál es tu primer recuerdo en River?
Entrar al club y ver lo grande que es. Me acuerdo de mi primer día y compartir vestuario con chicos que ya venían con rodaje en Primera, estaban dando sus primeros pasos y entrenaban con Reserva, como por ejemplo Javier Mascherano, Daniel Luedueña, Darío Conca y muchos chicos. La verdad que tuvo la suerte de compartir vestuario, partidos y entrenamientos con un platel de lujo de los cuales el 80 o 90% tuvieron una gran trayectoria.
Competiste por un puesto con grandes defensores en tus dos ciclos en River, ¿cuál consideras que era el mejor técnicamente?
Tuve la oportunidad de estar con grandes defensores, compartir y aprender. Me quedo con Celso Ayala y con el Coco Ameli, que fue un central que era titular indiscutido, que los más jóvenes lo mirábamos mucho. Era temperamental, ganador y líder. Nos gustaba ver cómo manejaba diferentes situaciones dentro de un partido. Yo trataba de aprender de él día tras día y minuto tras minuto.
Nasuti ante Independiente.
A lo largo de tus años en River tuviste varios entrenadores de renombre que todavía hoy siguen en la elite a nivel internacional, ¿qué enseñanzas te dejaron?
Uno trató de aprender de cada uno de esos entrenador, quedándose con las cosas buenas que le podían quedar de cara al futuro. Aprendí del Cholo Simeone, de Daniel Passarella, de Leo Astrada. Todos ellos tuvieron un gran recorrido como jugadores y mostraron un liderazgo extraordinario en el manejo de grupo y ahora como DT trato de llevarlo a cabo. No me quiero olvidar de Vitrola Ghiso que lo tuve en Reserva y fue muy importante en mi carrera.
¿Qué valor le das a los dos títulos que ganaste con en el club?
Muchísima, tanto uno como el otro los disfruté. Tanto en el de 2004 como el de 2008, fueron un poco diferentes por la participación de uno, pero se disfrutan al máximo y el valor que les doy es demasiado. Para conseguir ese objetivo se necesita mucho sacrificio y entrega de un grupo y soy muy agradecido por haber sido participe de grandes planteles que sumaron a la linda historia que tiene la institución.
¿Cómo era Gallardo como compañero? ¿Ya veías en él un posible director técnico?
Marcelo era un líder, tanto en el vestuario como en el campo. Con toda la trayectoria que tenía encima y con todo lo que demostraba día a día te contagiaba positivamente. En ese momento uno vía a un jugador que se tomaba en serio las cosas y que veía bien el fútbol y eso obviamente da una ventaja a la hora de tomar la decisión de tomar una decisión. Hoy nos sorprende a todos por todo lo que ganó en tan poco tiempo, Hizo bien las cosas y además se rodeó de grandes profesionales.
El Tano junto al Muñeco en el River Camp. (Foto: @tanonasuti)
¿El mundo River es distinto a todo?
Sin dudas, de todo lo que yo pude conocer, es totalmente distinto. Es un mundo en el cual tenés que convivir con la presión y la exigencia de hacer las cosas de la mejor forma, no tenés mucho margen de error. El vestir la camiseta de River te hace conocido en el mundo y es una gran responsabilidad. Uno no sabía la magnitud que significa ser jugador de River hasta que me tocó y en carne propia lo pude vivir y comprobar.
La actualidad del Tano
¿Qué rol cumplís actualmente en el Lorca? ¿Decidiste quedarte a vivir ahí o te gustaría volver a Argentina y volver a River para ocupar algún rol en particular?
Hoy estoy dirigiendo un equipo juvenil, una categoría nacional. Son chicos entre 16 y 18 años. Este es mi segundo año de experiencia, apunto a ir creciendo a pasos cortos pero firme. Quiero seguir aprendiendo y puliendo algunas cosas como entrenador. Jamás voy a descartar la posibilidad de volver a Argentina, es difícil hoy en día porque mi familia está muy bien acá y uno puede proyectar de cara al futuro. Tengo mi familia y uno siempre extraña a los amigos y a juntarse a comer un asado. Hoy me toca poner en la balanza todas las cosas y la prioridad la tienen mis hijos, por eso está el deseo de seguir en España y es la mejor opción.
¿Asesoras a deportistas para que puedan sobrellevar de la mejor manera el retiro de la actividad profesional?
Estoy trabajando para una compañía para asesorar a deportistas profesionales para que puedan organizarse de cara al futuro. Se y me tocó vivir que es muy difícil el momento del retiro. Uno se acostumbra a tener una rutina y a tener un ingreso mensual y de un día para otro se corta todo, donde vas a tener que llenar ese vacío, a cambiar las costumbres, de cumplir horarios y también el tema de cómo administrarse de cara a ese momento. Se cierra el grifo por parte del fútbol y hay que ver cuán bien se hicieron las cosas. Es importante que los jugadores que están activos puedas organizarse de cara al retiro. La intención es que puedan tener un futuro sobre una baso sólida.