River tuvo unos buenos 15 primeros minutos ante Gimnasia de La Plata en el estadio Juan Carmelo Zerillo. Con vocación ofensiva, intención de protagonismo, intensidad para presionar y moverse buscando espacios, el equipo pareció disimular la ausencia de la mayoría de los titulares. Pero todo se diluyó rápidamente y Marcelo Gallardo terminó muy disconforme.
Después de un primer tiempo en el que los gestos de su cara y sus efusivos gritos a la hora de dar indicaciones evidenciaron el descontento del Muñeco por la actuación del Millonario, el entretiempo tuvo tres modificaciones. Para jugar el complemento, Gallardo dispuso los ingresos de Franco Mastantuono, Rodrigo Villagra y el flamante refuerzo Maximiliano Meza.
Estaba estipulado que el volante correntino de 31 años, pese a tener apenas dos entrenamientos encima, sume sus primeros minutos con la camiseta del Más Grande. Sin embargo, el flojo rendimiento colectivo del equipo motivó a Gallardo a apurar la decisión de mandar a Maxi Meza a la cancha.