De un arranque a pura presión e intensidad a un final completamente desdibujado. Así terminó River el partido ante Colo Colo en Chile, con un resultado de 1-1 que termina siendo un alivio por cómo se dio la segunda parte. El complemento se jugó como quiso el equipo local y para colmo Paulo Díaz vio la roja en los últimos minutos.
En medio de un estado de confusión, el Millonario buscó sin mucho ímpetu volver a desnivelar el marcador. Lanzini se prestaba para tirar un córner desde la derecha y empezaron los forcejeos entre Paulo Díaz y Maximiliano Falcón, uno de los centrales de Colo Colo. De hecho, Lanzini tiró el córner y el árbitro lo hizo repetir porque Falcón acusó un golpe de Díaz.
El juez advirtió a ambos aunque sin éxito alguno. Antes de que la pelota volviera a ponerse en juego, nuevamente empezaron los empujones entre los dos. A la tercera, Clauss se cansó. Díaz y Falcón quedaron cara a cara, se pechearon y el árbitro brasileño le mostró la segunda amarilla a ambos y por ende la tarjeta roja.
Falcón se fue vociferando contra Paulo Díaz, lo mismo el defensor de River, y hasta lo invitó a pelear en la zona de vestuarios una vez que dejaran el campo de juego. Actitud infantil del zaguero del Millonario, que no va a poder actuar en la revancha del próximo martes en el Estadio Monumental.