Ariel Ortega volvió a dar una gran muestra de amor hacia el Más Grande y se grabó en la piel una imagen, junto con su hijo Tomás, de la emocionante despedida que tuvo en el Monumental.
EL 13 de julio de 2013 quedará por siempre grabado en la historia del Millonario. Es que aquel día un jugador fuera de serie como Ariel Arnaldo Ortega le dijo adiós al fútbol en un estadio Antonio Vespucio Liberti colmado de riverplatenses.
Años después de su partido homenaje, el jujeño decidió tatuarse la recordada frase que dejó en el cierre de la despedida para dar una nueva muestra de su amor hacia La Banda: “Gracias, Dios, por hacerme hincha de River”.
En las últimas horas, se conoció que el crack volvió a hacerse un grabado en la piel. Aunque esta vez, uno de los protagonistas es su hijo Tomás. ¿La curiosidad? La imagen que se tatuó es de su partido despedida, captada por Federico Peretti para La Página Millonaria en uno de los momentos más emotivos de aquella noche maravillosa: Ariel y Tomás se abrazan, mientras el Monumental los ovacionan. ¡Sos gigante, Burro!
+ La imagen que se tatuó Ortega:
(Foto: Federico Peretti)
+ PRATTO: Está a un paso de llegar a River.
+ ESTRATEGIA: River apuesta al desgaste del América para comprar el pase de Romero
+ PRETEMPORADA: todas las noticias del primer día de trabajo en Estados Unidos
+ POLÉMICA: Musto jugó 90′ pese a la posible sanción por doping y habló del tema
+ MAIDANA: “Si me toca ir al banco, lo tomaré de la mejor manera”
+ MERCADO DE PASES 2018: las novedades al instante sobre posibles altas y bajas