Fiore, un argentino devenido en reconocido conductor de televisión en México y Estados Unidos, dejó el país hace más de tres décadas, pero nunca olvidó su gran pasión: La Banda. Tras los títulos del último semestre y el Súper en DF, gastó al rival de toda la vida en vivo y en directo, frente a millones de televidentes. Conocé su historia a través de La Página Millonaria.
No es un hincha más. Fernando Fiore nació un 9 de julio de 1960 en Luis María Campos y Zabala, Capital Federal, a unas 30 cuadras del Monumental. Y desde la cuna lleva el manto sagrado en su corazón. Su padre era hincha del Más Grande, por lo que el hoy periodista más importante de Univisión heredó la pasión por River desde muy chico. A tal punto, que ahora alienta a River desde Estados Unidos, donde vive desde hace 33 años.
Fanático del Beto Alonso, amigo de Enzo Francescoli y orgulloso de ser comunicador, Fiore hizo teatro, radio y televisión. Además, escribió para diarios, revistas e Internet. Su libro más famoso fue “Vamos al Mundial”, una exitosa publicación en la que explicaba ‘Cómo llegar a la final de Alemania 2006’.
Su pasión por la redonda y su gran trabajo lo llevó a cubrir seis Copas del Mundo para Univisión, y este año estará en Brasil 2014. Estuvo también en cuatro Copas Confederaciones y cuatro sorteos mundialistas. En la actualidad, como desde hace 15 años, es el conductor de “República Deportiva”, un programa que se emite todos los domingos en vivo. El mismo desde el que, tras el Superclásico que River ganó en México, se burló de los hinchas de Boca mostrando la remera de la filial millonaria en Nueva York.
– ¿Cuándo nació el amor por River?
– Me crié en el Monumental jugando fútbol en el playón y en el anillo interno. Además jugaba pelota-paleta en los frontones que estaban donde ahora está el Museo. Fui socio promotor de River número 8614, si no me equivoco, hasta que me vine a vivir a Estados Unidos en 1980.
– ¿Qué recuerdos tenés de la infancia?
– Me probé en el 74 o 75 como arquero. Atajé todo el partido en la cancha auxiliar, salió 0 a 0 y pensé que quedaba, pero me dijeron que estuve muy bien pero estaba cerrado el libro y que volviera al otro año. Me lo creí, pero no volví más.
– ¿Ibas al Monumental?
– Iba a la popular a ver todos los partidos de River aunque fueran amistosos. Banqué al equipo en las malas y estuve en todos los partidos de local de la campaña 75 hasta q salimos campeones y arranqué el pedacito de césped cuando suspendieron el encuentro a medio tiempo y le ganábamos a Racing. Un grande el Puma Morete.
– ¿Cuál fue el primer partido que viste desde las tribunas?
– Fue un River con Huracán. Terminaron 0 a 0. Si no me equivoco, fue en el 68 y jugamos con la camiseta violeta que nos había regalado el Torino.
– ¿Qué otros partidos recordás?
– Antes de venirme a Estados Unidos, el partido que tengo en el corazón fue ese de 45 minutos contra Racing. Después de que me vine recuerdo el River vs. Boca que salieron 3 a 3, cuando nos estaban pegando un baile y casi lo ganamos al final. Ese día casi me tiro de la bandeja alta… También volví para el partido del Centenario, contra Peñarol, que fue un bodrio, pero era histórico. Estuve en el Superclásico con gol de Maidana y, por supuesto, volví para ver el del ascenso y llevarme otro pedacito de césped, aunque después salimos rajando de la cancha cuando llego la Policía y casi nos aplastan (risas).
– ¿Quiénes son tus ídolos?
El Beto es mi ídolo total. Segundo, el Pato, un fenómeno total. Además, como fui arquero, era lógico. Soy amigo del Enzo porque vivió muchos años acá en Miami. También me llevo muy bien con Marito Kempes. Entrevisté al gran Amadeo en el Monumental para mi libro en el 2005 y no lo podía creer.
– ¿Cómo viviste el último campeonato?
– Disfruté como loco el partido con Argentinos y el de Quilmes. No pude ir al Monumental ni a San Luis porque tenía que hacer mi programa en vivo en la TV y ya había pedido un domingo libre para ir a ver la pelea del Chino Maidana a Las Vegas.
– ¿Estuviste en el Superclásico en el Azteca?
– No, no llegué porque no podía volver a tiempo y hacer mi show en vivo el domingo a la mañana.
– ¿Cómo nació tu relación con la filial de River en Nueva York?
– El amor nació por Twitter. Los empecé a seguir y nos contactamos. Viví en New York 10 años en los 80, cuando hacía teatro y trabajaba de guía de turismo, antes de entrar en la TV. Ellos me mandaron las remeras y yo los saludo siempre en mi programa. Además los invité a que vinieran a mi estudio a que vieran el programa en vivo y salieron con la camiseta. Todavía no nos juntamos a ver un partido juntos, pero me encanta como copan Times Square.
– Gastaste a los hinchas de Boca en el programa.
– Sí. Es el sueño del pibe, porque con un solo gaste a los bosteros por TV, los estoy gastando y lo ven los cientos de miles de televidentes de República Deportiva, jajaja.