Las comparaciones suelen ser odiosas en el fútbol y si no pregúntenselo a Tomás Andrade, uno de los tantos juveniles de River que irrumpió en Primera División en el último tiempo y, con solo un puñado de minutos o partidos, rápidamente se le buscó un parentezco con algún ex jugador del Millonario, en este caso con Andrés D’Alessandro. Por su parecido físico y técnico y la habilidad en lapierna zurda, al mediocampista rápidamente se lo vinculó con el Cabezón después de su debut en 2016 ante Vélez en un aburrido 0-0 en el Monumental.
De hecho, el propio Andrade reconoció que D’Alessandro era su ídolo de chico y pudo darse el lujo de compartir plantel con él en River entre 2016 y 2017. Fue tenido en cuenta por Marcelo Gallardo durante ese tiempo hasta el fatídico partido con Belgrano por el torneo local que terminó marcando su etapa en River: erró un gol hecho debajo del arco por haber empujado la pelota con mucha displicencia y eso sentenció que su derrotero continuara pero lejos de Nuñez.
Tomás Andrade jugó 32 partidos en River y no pudo marcar goles. Ganó la Recopa Sudamericana 2016 y dos Copas Argentinas (2016 y 2017).
En 2018, Andrade jugó en Atlético Mineiro, luego en 2019 vistió la camiseta de Atlético Paranaense, entre 2020 y 2021 estuvo en Argentinos Juniors, donde apenas disputó seis encuentrso y tuvo un paso sin pena ni gloria, decidió probar suerte en el modesto Sud América de Uruguay (ocho goles y una asistencia en 29 partidos) y desde principios de este año viste los colores de Audax Italiano de Chile.
Lleva disputados 18 encuentros y si bien arrancó siendo titular en el primer tramo del torneo chileno, de los últimos 11 compromisos de su equipo solo estuvo presente en seis de ellos, siempre ingresando desde el banco de suplentes y permaneciendo no más de 15 minutos en cancha. Con 25 años años y su contrato con fecha de expiracióna fin de año, todo indicaría que el “Mini D’Alessandro” deberá buscar otra vez nuevos rumbos para su carrera en 2023.
Hace poco, Andrade fue muy autocrítico sobre su paso por el Millonario y reconoció que no supo aprovechar sus chances: “La verdad, yo no estaba preparado mentalmente para jugar en River. El click lo hice el año pasado al ver donde estaba jugando. Sin desmerecer a nadie, yo sentía que no merecía estar ahí por mis condiciones. A todos la madurez no nos llega al mismo tiempo. Hoy siento que me encuentro en un buen momento profesional y personal“, le dijo al sitio En Cancha de Chile.