El entrenador de arqueros de River que trabajó en el cuerpo técnico de Primera durante el tercer ciclo de Ramón, se mostró sorprendido por la salida del técnico y dijo que el plantel está golpeado, pero que debe reponerse para lo que viene.
Se encargaba de entrenar a los arqueros de la Reserva desde 2008 y formaba parte de la Escuelita de Fútbol de River Plate. Pero el precio a su trabajo y amor por La Banda tendría su merecida recompensa a fines de 2012, cuando Ramón Ángel Díaz le pidió a Gustavo Zapata si Tato Montes podía trabajar junto a él en Primera División.
Desde allí, Montes se hizo cargo de Marcelo Barovero y Leandro Chichizola, dos futbolistas que un año y medio después terminaron siendo claves en la obtención del título y la celebración. Sin embargo, tras los festejos, el Pelado decidió irse y el entrenador de arqueros se sorprendió.
“Para todos fue bastante duro. Realmente fue algo que nadie esperaba, de venir de tantos festejos y que de un momento para otro te pase algo así. Pero esto es River, hay que seguir adelante, lo bueno que pasó es que se fue como ganador. Por suerte la gente que trabajó no lo defraudó”, explicó Montes.
“Me sorprendió, no entendía nada. A la mañana habíamos estado juntos y ni siquiera me imaginaba que podía pasar algo así”, agregó en diálogo con “Esto es River”.
Por su parte, de la relación que mantuvo con el Pelado Díaz, agregó: “Me trató muy bien, me hacía participar, me explicaba cosas y le deseo lo mejor para lo que viene, tanto a él como a su hijo”.
Del plantel y la confusión por la renuncia de Ramón, contó: “El grupo está golpeado, pero esto es fútbol y tienen que adaptarse y asimilarlo para salir a la cancha de la mejor manera y ganar porque es el partido que todos quieren jugar”.
Finalmente, de su futuro, que tendrá que volver a Reserva a la espera de un nuevo cuerpo técnico, cerró: “Soy empleado de River y lo que sea mejor para el club será lo mejor para mí. Si le hace bien, bienvenido y si no en el lugar que esté voy a estar bien”.