La historia de Jonatan Maidana ligada a River es de película, y su primer Superclásico oficial con la banda roja no podía ser de otra manera que único e inolvidable para él. El marcador central llegó al club a mediados del2010, y el 16 de noviembre de ese año se disputó el partido contra Boca en el Monumental, correspondiente al Torneo Apertura.

Jony no solo llegaba a Núñez con su pasado en el clásico rival como futbolista, sino que además había sido campeón de América con el Xeneize, por lo que todas las miradas de los hinchas de ambos clubes estaban posadas sobre él en aquella jornada que mostró un estadio repleto y que terminó con la fiesta roja y blanca.

A los 8 minutos del segundo tiempo y con el partido empatado 0-0, Erik Lamela pateó un tiro de esquina desde el lugar donde se juntan las tribunas Sívori y San Martín, y de cara al arco donde la hinchada de River se hace escuchar como ninguna. La perfecta ejecución del zurdo encontró la cabeza de Maidana, quien de pique al piso y a la carrera hizo sacudir las redes del arquero Javier García.

Y allí el zaguero riverplatense no solo salió a celebrar su gol abrazado por todos sus compañeros, sino que además lo gritó con alma y vida, demostrando su amor por la camiseta de River más allá de su pasado. Ahí se vio la primera gran muestra de amor entre el futbolista y los hinchas, sin saber todavía que Jony se quedaría a pelearla en la etapa más difícil de la historia del club y terminaría coronando su primer paso por el club en Madrid, alzandola Copa Libertadores más importante de todas.

Este domingo en la Bombonera, Maidana tendrá la posibilidad de formar parte nuevamente de un Superclásico en caso que Marcelo Gallardo así lo considere, y quizás pueda encontrarse con la chance de repetir una actuación que haga delirar a los simpatizantes del Más Grande.