River es el club más grande del país y si bien el Monumental continúa siendo la casa madre del fútbol argentino, está claro que necesita una modernización acorde al fútbol de estos días. Es por eso que desde hace un tiempo, se debate internamente entre los hinchas de River si hay que remodelar el estadio actual o construir uno nuevo. Pero a la discusión se le suma un dato bomba para los nostálgicos: el levantamiento de un nuevo Monumental implicaría una leve mudanza.

¿Por qué mover la ubicación del Monumental? Hay varios factores sobre la mesa que alimentarían a la actual dirigencia a aplicar esta estrategia. Por un lado permitiría no perder la localía durante la construcción (algo que puede demandar entre 4 y 5 años), y la venta de gran parte de los terrenos actuales serviría para invertir en el proyecto.

Para solventar los gastos del plan (estimados alrededor de 250 millones de dólares), además del dinero que se desprendería de la venta de parte de la zona actual para emprendimientos inmobiliarios, se apostaría al aporte de empresas privadas que podrían ponerle su nombre al nuevo Monumental. Mientras el Museo, el estacionamiento y la pileta se mantendrían en la ubicación presente, el Instituto se mudaría enfrente, donde actualmente se encuentra Tiro Federal. El resto de los deportes que se practican en el club, comenzarían sus actividades en los terrenos que se desean adquirir para el nuevo proyecto.

¿A dónde se mudaría el Monumental? A los terrenos de la ex ESMA, a unos 700 metros de la ubicación actual y el flamante estadio contaría con una capacidad de 85.000 personas. Claro que también está latente la chance de solo remodelar. Costaría aproximadamente 45 millones de dólares y se acercarían las plateas a la pista de atletismo y se construiría un techo. La contra a esta idea se basa en la resignación de la localíay la incógnita de la localización del colegio y de los distintos deportes que se practican diariamente en el club durante la construcción.

En diálogo con Infobae, Rodolfo D’Onofrio manifestó: “nosotros tenemos dos proyectos: el de remodelar y el de construir uno nuevo. Todavía no está definido. Pero el tiempo y los números nos están demostrando que el de refacción no va. La obra que hay que hacer no condice con el producto final que tendríamos. El Monumental tiene 80 años y River históricamente prefirió construir. Empezó en la Dársena Sur, después tuvo la cancha en La Boca, después pasó a Alvear y Tagle y finalmente llegó al Bajo Belgrano. Siempre fue al progreso y ese es el paso que tiene que dar. Es mi opinión, pero yo no soy el dueño del club”, explicó.

El 2019 será el año en el que el debate llegue a su punto máximo: “los que dicen que hay que refaccionar presentarán también su proyecto. Lo discutiremos democráticamente. Con el tiempo, la Comisión Directiva presentará el que considere el proyecto más conveniente y será la asamblea de socios quien defina”, afirmó el presidente de River. Por último dejó en claro su postura: “yo también viví grandes momentos en el Monumental. Momentos que no voy a olvidar en toda la vida. Pero a los más nostálgicos hay que decirles que el estadio va a seguir estando hasta que hagamos el nuevo.Lo vamos a someter a votación en la Asamblea de Representantes de Socios“.