A lo largo de la historia de River son cientos los jugadores que dejaron una huella para el recuerdo. Sin embargo, solamente hay dos que transformaron en leyendas absolutas del club, que lograron tener monumentos en el ingreso del inmenso Monumental. Uno de estos es Marcelo Gallardo y el otro; el gran Ángel Omar Labruna. Un delantero que no paro de hacer goles hasta asegurarse que nadie lo pueda alcanzar. Ni siquiera hasta este 2024, cuando se cumplen 85 años de su debut.

Una gloria no solo de River sino del fútbol argentino que un 18 de junio como hoy, pero de 1939, comenzaba a escribir un legado y un respeto que aun prevalece en quienes no superan los 20 años y, aunque jamás lo vieron jugar más allá de algún video en Youtube, te dicen que el ídolo máximo de la institución por encima de cualquiera.

El inesperado debut de Labruna en River

Con apenas 18 años, Ángel Labruna la rompía en las divisiones formativas de River. Ya eran varios los que hablaban de él y así como ocurrió con tantas joyas; su debut se esperaba con mucha ansia. Pese a esta especulación, los hinchas no se imaginaban que el 18 de junio de 1939 el mismo se terminaría dando por una decisión gremial.

Debido a una huelga que llevaron adelante las grandes figuras del equipo en contra de los dirigentes, River tuvo que poner a varios pibes para jugar ante Estudiantes de La Plata para completar el equipo. Una oportunidad que Labruna supo aprovechar de gran manera.

Labruna marcó un cambio radical en River

El destino debe ser caprichoso o amante de Hollywood, porque pareciera enamorarse de estas historias en donde el pibe cumple su sueño, la rompe toda (pese a que River perdió 1-0) y deja enamorados a todos. Sin embargo, de manera repentina, se despierta de un cachetazo y tiene que volver a empezar para ganarse un lugar.

Vuelta a reserva y a esperar otra oportunidad

Pese a que Ángel Labruna demostró cualidades de sobra para permanecer en el primer equipo de River, el DT decidió mandarlo a la reserva para que siga formándose. En el plantel había algunos nombres como Adolfo Pedernera, Juan Manuel Moreno o Juan Carlos Muñóz. Era lógico que un pibe, por más bueno que sea, pueda no tener lugar.

Poco le importo esto a Labruna. Él siguió haciendo lo suyo en reserva, esperando su oportunidad. Fue tan solo un año después que el Feo volvió al primer equipo y lo hizo de tal manera que hasta el Moreno tuvo que cambiar de posición para seguir en cancha junto al máximo ídolo del club.

El paso de Ángel Labruna por River

El amor fue inmediato y eterno, Labruna jugó en River durante 20 años y su legado permaneció para siempre. Durante este tiempo, el Feo dejó una huella imposible de llenar con 317 goles en 541 partidos. Números que lo hacen el máximo goleador del Millonario y de los Superclásicos.

Labruna dejó una huella como jugador y como entrenador.

Formando parte de la mítica delantera denominada como “La Máquina”, Ángel Labruna ganó un total de 16 títulos con la camiseta de River como jugador. Sin embargo, si se le suman sus 6 estrellas como DT la sumatoria se va a 22 consagraciones.

Durante sus tres etapas como entrenador de la banda, Ángel Labruna dirigió un total de 517 partidos de los cuales se llevó la victoria en 279, empató en 140 y perdió en 98 con un impresionante 67.5% de eficacia. Además, sus equipos marcaron 943 goles y recibieron 409.