Ante la baja de Enzo Pérez por suspensión y con la necesidad de mejorar el funcionamiento del equipo, Marcelo Gallardo apostó por Matías Kranevitter y Rodrigo Aliendro desde el arranque, pese a que ninguno venía sumando demasiados minutos. Una decisión que resultó un acierto y quedó reflejada en el juego de River.
Con presencia y concentración, ambos volantes tuvieron una gran noche ante Atlético Tucumán y demostraron que pueden ser alternativas importantes. Una grata sorpresa para un Gallardo que encontró más soluciones de las que esperaba.

Aliendro y una actuación que ilusiona
Con buen ritmo e inteligencia para moverse en el mediocampo, Rodrigo Aliendro se convirtió en esa pieza que Gallardo no encontraba desde la lesión de Giuliano Galoppo. Un jugador con despliegue para colaborar en defensa, pero también con capacidad para asociarse en ataque.
Siempre ofreciéndose como opción de pase, Aliendro fue clave en la triangulación y generó peligro pisando el área en varias oportunidades. Incluso estuvo cerca del gol tras recibir un pase filtrado de Maxi Meza, pero su remate se estrelló en el palo.
Kranevitter no se da por vencido
En cuanto a Matías Kranevitter, el tucumano sabe que la llegada de Kevin Castaño a River le sumará competencia y reducirá sus minutos en cancha. Sin embargo, lejos de rendirse, dejó una actuación sólida para demostrar que puede pelear por un lugar.
Firme en la marca, criterioso con la pelota y rápido para cortar y anticipar, Kranevitter cumplió con creces todo lo que le pidió Gallardo. Una respuesta que sin dudas le abre más opciones al DT de cara a las rotaciones que se vienen.