River le dio inicio a su participación en el Mundial de Clubes. Bajo el sol de Seattle, ambos equipos salieron a la cancha siguiendo el peculiar protocolo del certamen. Y mientras la incertidumbre reinaba entre los 22 jugadores, el capitán de Urawa Red Diamonds tuvo un gesto que generó controversia.
La polémica actitud del capitán de Urawa Red Diamonds
Ambos equipos ingresaron a la cancha y se formaron, de forma peculiar cabe aclarar, en el centro del campo. Sin entender demasiado el protocolo a seguir, los árbitros le indicaron a los jugadores del conjunto japonés que avanzaran en fila para saludar a los jugadores del Millonario, quienes tampoco tenían demasiadas certezas sobre qué hacer.
Los futbolistas de Urawa procedieron a saludar a los de River. En realidad, lo hicieron todos menos uno. Marius Høibråten, capitán del equipo, caminó por el costado de los jugadores del Millonario, aunque sin saludar a ninguno de ellos. Quienes lo seguían en la fila sí se detuvieron a darle la mano a sus rivales.
Lo que es el karma: luego de su gesto repudiable, el futbolista noruego fue protagonista de un blooper de aquellos. Le regaló el segundo gol a Sebastián Driussi tras un cabezazo hacia atrás que quedó en el camino y dejó pagando al arquero local.