Después de un error defensivo del capitán de Urawa Red Diamonds, Sebastián Driussi se movió rápido y anticipó a Shusaku Nishikawa con un certero cabezazo que puso el segundo gol del Millonario en el marcador. Lamentablemente, el atacante apenas pudo festejar porque cayó lesionado después dle salto.
Sin sentido de la dirección por un golpe del arquero, Driussi giró sobre su eje en el aire y pisó muy mal con el tobillo izquierdo. En forma de latigazo, el delantero sufrió una fuerte torcedura del pie que lo obligó a salir de la cancha inmediatamente.
Sin siquiera poder festejar el gol, Driussi pidió rápidamente el cambio y se fue llorando del campo de juego. En su lugar, Marcelo Gallardo dispuso que Miguel Borja sea el delantero que ingresó a completar el partido junto a Facundo Colidio.
Así estaba Driussi en el banco
Después del golpe, de salir y de tranquilizarse, Driussi se mostró un poco más calmo en el banco de suplentes. Con el tobillo inmovilizado, el delantero estuvo hablando con sus compañeros y pareciera que le dijo “me rompí todo”, según Juan Pablo Varsky.
La imagen que preocupó a todos fue la del final del partido, cuando Driussi se retiró cargado a las espaldas de La Roca, el jefe de seguridad del plantel, que luego lo dejó en una silla de ruedas. El delantero no pudo apoyar en ningún momento el pie y se someterá rápidamente a estudios para confirmar el grado de lesión. Por lo pronto, el primer diagnóstico es esguince de tobillo, aunque se teme una gravedad mayor.