Durante casi todo el mercado de pases, River estuvo envuelto en una novela que no tuvo final feliz. Si bien en varias oportunidades estuvo cerca de convertirse en refuerzo, Lucas Esquivel finalmente no llegó al Millonario y hoy atraviesa un presente totalmente inesperado.
Pese a haber sido uno de los pocos jugadores que estuvieron a la altura en la campaña que desembocó en el descenso de Athletico Paranaense a la Serie B durante 2024, el lateral izquierdo dejó de sumar minutos en el conjunto brasileño y, desde que se fustró la negociación con River, solo fue al banco de suplentes en una oportunidad.

Sin entrar en los planes del entrenador tras el tire y afloje del mercado, Esquivel apenas integró una convocatoria: fue ante Cianorte el 28 de enero, por el torneo estadual, aunque no ingresó. De hecho, una semana antes de aquel partido, había tomado la decisión de interceder para llegar al Millonario. Desde entonces, pasaron siete encuentros en los que no fue ni siquiera al banco.
Cansado de los constantes cambios de postura del presidente de Athletico Paranaense, el defensor optó por no volver a jugar para el equipo brasileño. Sin embargo, tras caerse la negociación con River, su determinación terminó jugándole en contra y dejó su futuro envuelto en una gran incertidumbre.
La dura comparación entre 2024 y 2025
Para entender el impacto que tuvo su fallida llegada a River, basta con comparar su nulo presente con lo que fue su 2024: disputó 53 partidos, convirtió dos goles y dio nueve asistencias, siendo uno de los defensores con más pases gol del Brasileirao.