Miguel Borja es uno de los seis jugadores a los que Marcelo Gallardo les confirmó que no iban a seguir en River y, como era de esperar, no se presentó en el entrenamiento de este sábado, más allá de seguir teniendo contrato. Recientemente estuvo en el centro de la tormenta, ya que se habló de un supuesto pase a Boca y que lo tenían en carpeta, pero todo fue una maniobra para mostrarse y arreglar con otro club en el mercado de pases.

La novela del Colibrí con el eterno rival comenzó cuando le preguntaron abiertamente en una entrevista si jugaría en la vereda de enfrente. Lejos de negarlo como los hinchas del Millonario hubiesen esperado por seguir siendo un hombre del club hasta el 31 de diciembre, manifestó: “Uno no puede cerrar las puertas. La puerta de regresar a Argentina quedó abierta”.

Si bien el colombiano dejó este guiño, lo que lo llevó a recibir múltiples insultos por parte de la gente del Más Grande, la realidad es que nunca hubo negociaciones formales para que pase al conjunto de la Ribera, más allá de que se hablaba que estaba en la mira para 2026. Mientras en el país se hablaba de este tema, en paralelo el delantero estaba formalizando su arribo a Cruz Azul.

Hay acuerdo: Borja se va a Cruz Azul

De acuerdo a la información del medio partidario Vamos Azul, los mexicanos llegaron a un acuerdo total con Borja para que se convierta en refuerzo del Cementero de cara al 2026. Además, el reporte marca que entre el 26 y 28 de diciembre llegará al país centroamericano para realizarse los estudios médicos y firmar su contrato.

Borja se va de River para jugar en Cruz Azul y no en Boca como se decía.

Actualmente, el delantero se encuentra disfrutando de sus vacaciones en Cartagena, Colombia, donde transita sus últimos días como jugador sin club junto a su familia. Su vínculo contractual con el Millonario llega a su fin pronto, concluyendo así una etapa que no terminó de la mejor manera en cuanto a la relación con la hinchada por sus últimas actuaciones en el campo de juego.

Los números de Borja en River

River pagó 8.6 millones de dólares por Miguel a mediados de 2022. Si bien sus números no son malos (62 goles en 159 partidos), el balance de su ciclo es negativo, más allá del primer semestre de excelencia que tuvo en 2024. Este año su nivel estuvo por debajo de las expectativas, casi sin convertir, y no pudo aprovechar las reiteradas oportunidades de Gallardo.