Llovió en Córdoba lo que llueve en River, que quedó eliminado en semifinales de la Copa Argentina en manos de Independiente Rivadavia, protagonizando un nuevo papelón en este 2025 para el olvido. Contra un rival menor, en una instancia en la que la jerarquía debería inclinar la balanza, el equipo de Marcelo Gallardo volvió a flaquear.
Jugó pésimo. Es cierto, condicionado por el estado del campo de juego producto del clima. Pero no es excusa. Llegó a penales pero Borja y Galoppo erraron los primeros dos tiros y el Más Grande corrió de atrás de entrada. Esta vez Armani no lo salvó y, consumada la derrota, los hinchas volvieron a expresarse contra los jugadores.
La gente va a todos lados, llena la cancha, alienta todo el partido, y recibe con calor y cariño al plantel en cada rincón del país. Pero dentro del campo de juego, River no devuelve nada. Y no solo en resultados, tampoco en formas. No hay fútbol, pero tampoco carácter. Un equipo que no representa, que deja a gamba a su gente y que pierde casi todos los partidos importantes.
Uno por uno: los papelones de River en 2025
- Perdió la Supercopa Internacional vs. Talleres
- Eliminado en cuartos de final del Torneo Apertura 2025 con Platense, de local
- Eliminado en fase de grupos del Mundial de Clubes
- Eliminado en cuartos de final de la Copa Libertadores
- Perdió con Riestra y Sarmiento de Junín de local
- Eliminado en semifinales de la Copa Argentina vs. Independiente Rivadavia
El año empezó con un River muy reforzado pero sin volumen de juego y con una gran dificultad para convertir goles y ganar. El punto cúlmine fue esa derrota en Paraguay contra Talleres por penales, en la final pendiente de 2023. A partir de ahí, el Millonario empezó a remontar, logró una buena racha y ganó el Superclásico. Pero en el primer mano a mano, quedó afuera de local con Platense.
Fue al Mundial de Clubes y, en un grupo que lo obligaba a pasar de ronda, quedó tercero y se volvió a Argentina. No quedó eliminado en octavos de Copa Libertadores con Libertad por Franco Armani, pero sí en cuartos con Palmeiras, un rival de jerarquía que explotó las falencias de River.
El golpe continental fue tan fuerte que el Más Grande hizo papelones con Riestra y Sarmiento en el Monumental. Ese triunfo en Copa Argentina con Racing bajó un poco los humos, pero todo se vuelve a ir a pique con esta derrota con Independiente Rivadavia. A River le queda el Superclásico y dos caminos para entrar a la Copa Libertadores 2026.
