Los puntajes de los jugadores de River Plate luego del encuentro frente a Sarmiento de Junín en el Estadio Monumental, correspondiente a la duodécima fecha del Torneo Clausura 2025. El Millonario cayó por 1-0 en otro partido que roza lo vergonzoso.
Uno por Uno de River vs. Sarmiento: los puntajes
Franco Armani (2): grosero error al dar rebote en un remate que se iba afuera y terminó en gol de Sarmiento. Responsable directo de la derrota. Tapó un mano a mano claro en el segundo tiempo que hubiese sentenciado la historia a favor del rival.
Fabricio Bustos (3): le faltó más decisión en los ataques. Tuvo una chance clara sobre el final del primer tiempo pero el remate le salió centrado. Más allá de no haber desentonado, sigue sin convencer. Por momentos tímido y con desacoples esporádicos en defensa. Ni fu ni fa, de nuevo.
Lucas Martínez Quarta (4,5): se tuvo que adelantar varias veces con pelota dominada para tratar de romper líneas al no tener un solo compañero cerca. En los últimos 15 minutos parecía casi un volante ofensivo. Pateó mucho desde lejos y casi siempre desviado. En defensa prácticamente no lo exigieron.
Paulo Díaz (5): abusó del juego directo y del pelotazo largo. Dividió demasiado para la cantidad de espacio que ofrecía Sarmiento para salir jugando desde abajo y conectar con los mediocampistas. En el segundo tiempo estuvo más preocupado en pelearse en los corners a favor que otra cosa.
Milton Casco (3): quedó a mitad de camino en casi todas las jugadas, tanto en ataque como en defensa. No terminó de ser una opción confiable en campo contrario y cuando lo atacaron no la pasó del todo bien, sobre todo cuando Vigo se sumó al circuíto ofensivo de Sarmiento. Se resbaló demasiado también. Muy discreto.
Thiago Acosta (5): Gallardo lo puso en una posición que no es la suya. No logró sobresalir y priorizó el no equivocarse y tratar de hacer las cosas sencillas. Sin arriesgar pases ni complicarse. No tuvo muchas luces Teniendo en cuenta ese contexto, no desentonó -salvo una pérdida peligrosa en el complemento- y no mucho más. Ni de cerca es responsable de la crisis futbolística del eequipo.
Giuliano Galoppo (4): muy lejos del área y limitado a una función defensiva. Jugó más cerca de la base propia que del campo contrario y eso lo contuvo demasiado. Pocas intervenciones de calidad, sumado a que se notó que le cuesta marcar. Se animó un par de veces a pegarle desde lejos y fue el mayor peligro que pudo generar, después se desinfló al igual que el resto.
Nacho Fernández (3,5): intermitente e improductivo. Se lo notó muy fastidioso, tanto consigo mismo como con el árbitro, y tuvo poca claridad con la pelota. Solo algunos chispazos de lucidez. Tampoco le aportó esa pausa al equipo para pensar un poco, sino que se contagió de ese vértigo de ir adelante como sea. Mucho pase hacia el costado y poco para adelante con sentido. Ni siquiera pudo sumar un diferencial desde la pelota parada. Difícil de entender que haya jugado todo el partido. Terminó jugando casi de número cinco.
Santiago Lencina (6,5): activo y asociativo durante toda la noche. Tuvo tiempo y panorama para comandar los ataques a espaldas de los volantes de Sarmiento. Una vez más, fue el encargado de unir las líneas y juntar al equipo en profundidad y en las transiciones ofensivas. Interpretó muy bien los espacios libres y se movió siempre a favor de las jugada. Solo le faltó algo de pausa y no abusar de la aceleración para llegar al arco. Cuando salió, River empeoró.
Maxi Salas (4): poco contacto con la pelota y mucho movimiento al espacio, pocas veces captado por sus compañeros. Cuando le llegó algún balón, siempre estuvo de espaldas, por la verticalidad que tuvo el equipo todo el tiempo, y la terminó perdiendo en muchas de sus intervenciones. Se fue diluyendo con el correr de los minutos y terminó contagiándose de la confusión generalizada.
Facundo Colidio (3): al igual que Salas, jugó más de espaldas que con la cancha de frente. Acumuló un sinfín de imprecisiones, algunas por la apatía que tiene de a ratos y otras por intentar ir hacia adelante y mostrar algo distinto, sin éxito. La gente está hastiada de su nivel. Salió en el entretiempo por Borja.
River fue un espanto y cayó ante Sarmiento.
Ingresaron
Miguel Borja (4): prácticamente no la tocó en todo el segundo tiempo. Y cuando lo hizo, decidió mal o tardó en descargar y buscar el mejor pase posible. Se perdió entre los centrales de Sarmiento.
Sebastián Driussi (4): no encontró nunca su lugar en la cancha desde que ingresó. Con River atolondrado y acelerado, apenas pudo sumarse y participar en alguna secuencia de pases. Ni hablar de tener alguna chance clara de gol.
Cristian Jaime (7): entró en un contexto ultra desfavorable e intentó hacer lo que pudo por el costado izquierdo. Alguna que otra gambeta aislada y no mucho más. En los últimos minutos, cuando todo era un caos, agarró la pelota, mostró atrevimiento e inventó un jugadón en el 1-1 de Borja que no terminó siendo por offside. Fue un oasis en el desierto.
Maxi Meza (-): pasó absolutamente desapercibido desde que entró. La nada misma. Lo único bueno es que volvió a sumar minutos después de varios meses, pero casi nadie se enteró.
