En Núñez han pasado decenas y decenas de futbolistas. No cualquiera ha tenido la chance de triunfar y de estar a la altura de lo que representa un club como River.

Cristian Carlos Villagra, quien vistió el manto sagrado entre 2007 y 2010, no logró dejar una huella importante en su paso por La Banda. Fue un lateral izquierdo correcto, con algunos altibajos, que captó la atención del entonces entrenador Daniel Passarella.

Durante varios años logró asentarse en el primer equipo, pero lo cierto es que el hombre que provino de Rosario Central no dejó una gran imagen en el hincha del Millonario. Aun así, consiguió un título: el torneo Clausura 2008 con Diego Simeone como DT.

A mediados de 2010, Villagra fue transferido al Metalist (Ucrania) por dinero más los pases de Jonatan Maidana y Walter Acevedo como parte de pago. Allí disputó 144 encuentros oficiales (por la liga ucrania, Copa de Ucrania y Europa League) y convirtió seis goles.

Tras cinco temporadas en el país europeo, el Kity regresó a la Argentina y se sumó a Rosario Central, el club que le dio la posibilidad de jugar en Primera. Y más tarde, a principios de 2018, pasó a Atlético Tucumán.

Sin embargo, el Kity debió retirarse del fútbol en junio de 2018. La noticia causó curiosidad y sorpresa en el ambiente del fútbol: el defensor dejó la pelota de lado para ayudar a uno de sus hermanos, quien debía hacerse un trasplante de médula ósea. El lateral se presentó como donante, motivo que lo obligó a dejar la actividad, pero lamentablemente su hermano falleció

Villagra estuvo un tiempo para poder recuperarse y, en marzo de 2019, anunció su vuelta a las canchas. Se sumó a 9 de Julio, un equipo de Morteros, Córdoba (su ciudad natal) que compite en la Liga Regional de San Francisco.

¿Qué lo llevó al lateral izquierdo a salir del ambiente del fútbol profesional? "Yo en realidad tenía que volver a Atlético Tucumán en su momento. Y justo pasó lo de mi hermano. Después pasaron seis meses y me seguían esperando en Tucumán. Ya después tampoco tenía cabeza y tampoco creo que tengo cabeza ahora para jugar en nivel profesional. Sé lo que te exige y hoy en día no estoy preparado. Así que tomé la decisión de no seguir jugando profesionalmente y quedarme acá en Morteros", sostuvo en una entrevista con el medio La Voz.

En tanto, acerca del gran gesto que tuvo hacia su hermano, el Kity reveló que se culpó por no haber podido pasar tanto tiempo en familia debido al fútbol: “En un principio sentí culpa porque yo realmente no pasé mucho tiempo con mi hermano por estas cuestiones de jugar profesionalmente, que tenés que viajar o estar en otros lados. Y en un momento llegué a echarle la culpa al fútbol de lo que había pasado con mi hermano, de no haber compartido más tiempo con él. Así que también fue por eso que uno estaba mal en ese momento”.