Norberto Osvaldo Alonso es sinónimo de River. Palabra autorizada para hablar de lo que ocurre en torno a Núñez. Su forma al hablar puede resultar chocante para algunos, muchos la pueden compartir y otros no, pero si hay algo que lo caracteriza es que no suele maquillar lo que piensa. Opina con guapeza, como cuando jugaba con el manto sagrado.

El ídolo del Millonario, y uno de los más grandes jugadores que tuvo el fútbol argentino, dialogó con LPM Radio -programa emitido todos los miércoles de 22 a 00 horas por Radio y Punto-, contó cómo vive el presente exitoso del equipo de Marcelo Gallardo y también opinó sobre la conquista ante Boca en la Copa Libertadores.

"Este presente es óptimo. Cuando le ganas un partido es como ganarle un campeonato. Esto se extendió al mundo y quedaron más expuestos por haber perdido y por haber boqueado sin tener equipo. No vi al Boca aguerrido, que vos ibas y te pegaban alguna que otra patadita. Siempre les gustó el juego aguerrido o malintencionado. Tampoco culpo a los jugadores que te metían, había que ser guapo para jugar en Boca y en la cancha de Boca", sostuvo el exenganche.

¿Qué opina de los jugadores, exjugadores o dirigentes de Boca que intentan minimizar la final que perdieron con el Millo? "River fue un justo y un legítimo ganador, lo que puedan hablar los demás... La Boca ya por este tiempo no existió y no existe, lo lamento por los hinchas. Los hinchas son hinchas y la verdad que no se puede objetar nada. River fue un legítimo ganador", manifestó Alonso.

En tanto, el Beto dejó en claro que River volvió a ser ese equipo ganador, que se viste de verdugo ante Boca y recordó una frase que Carlos Tevez expresó en varias oportunidades: "Tevez tiene razón, es una gran verdad, todo volvió a la normalidad"

Chicho Serna, ídolo de Boca, expresó hace unos días que "la final en Madrid ya es historia para Boca". ¿Qué dijo Alonso al respecto? "¡Qué referente! ¿Referente de qué? Dejate de joder... Ay, Dios mío. Cómo estarían estos muchachos si nos hubieran ganado... Conozco cómo son. Chicho Serna fue hincha y sigue siendo hincha", sentenció.

 

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Le gusta cómo juega este River: "Es el mismo River que te inspira confianza cuando vas a la cancha. Lástima que se lesionó Casco, realmente había levantado. Es un marcador de punta, que más allá de que la gente lo castigó, rindió. Puede jugar de 4, de 3, pone el cuerpo muy bien para jugar en ambos laterales".

Similitudes entre Gallardo y Labruna: "Los dos buscan el arco de enfrente. En mitad de cancha siempre están pensando en cómo hacerle daño al rival".

Comparaciones entre este River multicampeón con el River que ganó todo en 1986: "Las comparaciones son odiosas. Nosotros tuvimos un equipo con jugadores de Selección. Algunos no vieron al famoso equipo del '86. Si ganó todo, ¿por qué ganó todo? Eso se tienen que preguntar... Ese equipo tenía desde el arco hasta el número 11 un equipo alineado y bien formado. Yo remarco mucho también haber tenido un técnico ganador. Hay muchas cosas que juegan, no sólo jugaba el número 10 o el 8, es un equipo. Ese equipo ganó todo para poder estar en las vitrinas del Museo River".

Comparación entre la pegada de Quintero con la que él tenía: "Comparar no se puede comparar nada, para mí. Poder decir que tiene cosas parecidas es una cosa. Lo que sí podemos comparar los millones que tiene hoy Juanfer con los millones que tengo yo, ja. Lo que vale él y lo que valgo yo, que hoy no valgo nada, ja. Sí valgo como persona, que es la educación que me dieron mis viejos y que para mí es fundamental".

Su labor en River: "Estoy con las escuelas de fútbol, el hincha sabe el amor que le tengo al club, siempre estoy dispuesto para el club. Todo lo que me pida River estoy para sumar. Además de las escuelas, estoy con la Fundación River y colaborando con el club".

En el fútbol actual considera que muchos jugadores hablan mucho y juegan poco: "Hoy los medios meten el micrófono y algunos jugadores dicen cualquier cosa. Los jugadores se tienen que acostumbrar a jugar más y hablar menos. Eso de cargar a la gente no va... Así no vamos a tener más público visitante. La gente está cada vez más loca. Eso no conduce nada. Los jugadores son los que le tienen que demostrar a la gente que son ganadores y terminan demostrando que son perdedores".