Corrían los primeros 15 minutos del amistoso entre River y Nacional. La jornada comenzó a puro jolgorio en el Campus de Maldonado, con entrega de plaquetas por parte del Bolso a Gallardo y su cuerpo técnico. Sin embargo, una vez que comenzaron las acciones, los futbolistas se metieron de lleno en lo que acontecería dentro del verde césped.

Y él no podía ser la excepción. Es que en el primer cuarto de hora, Franco Armani cautivó los ojos de todos los presentes en el país vecino con dos atajadas descomunales que evitaron la apertura del marcador a favor de Nacional.

García y Rodríguez intentaron vulnerar la valla del Chili quedando solos en el área chica, pero el casildense se hizo gigante y evitó en dos oportunidades que su arco pierda el invicto. En la segunda intervención debió estirarse con las fuerzas que le quedaban (sufrió un golpe que le impidió moverse con normalidad en ese entonces) para volver a desviar el balón.