Dicen que los arqueros de equipos grandes no tienen muchas atajadas para realizar. Pero cuando el peligro llega al área, se debe responder. Y eso es exactamente lo que hace Franco Armani en River: se agiganta en los momentos que el equipo lo requiere.
Sin ir más lejos, este jueves sólo tuvo un par deocasiones en las que sus compañeros necesitaron de su protagonismoy el Chili estuvo a la altura. El guardameta del Más Grande atajó dos remates difíciles y le negó a Athletico Paranaense la posibilidad de convrtir un gol para ponerle suspenso a la final de la Recopa.
En el primer tiempo, cuando marchaban 31 minutos,el oriundo de Casilda se hizo gigante para desviar un tiro prácticamente abajo del arco a Lucho González.
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Ya en el complemento, y con River ganando 1-0,Lodi disparó desde afuera del área y el balón se metía en el palo izquierdo del santafesino. Sin embargo, la mano de Armani llegó para mandar el remate directo al córner.
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El campeón ganó 3 a 0, es verdad.Pero tuvo, una vez más, las manos de Franco Armani para contribuir en el camino hacia un nuevo título internacional.