La pretemporada de River en Bradenton cuenta con todas las comidades que necesita un plantel profesional para prepararse de cara a una pretemporada muy exigente. Día a día, los dirigidos por Martín Demichelis vienen subiendo cargas y la intensidad de los trabajos, con un denominador común: la presencia de la pelota en la mayoría de los ejercicios que vienen realizando.
En las primeras imágenes de la pretemporada también llamó la atención otro detalle: los arqueros trabajaron con unas gafas especiales. A primera vista, parecen lentes de sol. Pero se trata de una tecnología que viene ganando cada vez más terreno en los deportistas de alto rendimiento y que tienen un punto de contacto con lo que el Millonario viene trabajando desde hace tiempo en materia de neurociencia.
Esta llamativa tecnología que incorporó River para el trabajo de los arqueros recibe el nombre de lentes estroboscópicos. Estas gafas permiten realizar algunos ejercicios muy específicios, que apuntan a mejorar los reflejos y la capacidad de reacción de los guardametas. En el caso de River, los cuatro arqueros probaron la nueva herramienta y las redes sociales del millonario mostraron algunas imágenes pocas veces vistas.
¿Cómo funcionan los lentes estroboscópicos?
Los lentes que utilizan los arqueros de River en la pretemporada son un accesorio tecnológico que permiten generar lo que se denomina “efecto estroboscópico”. ¿Qué significa esto? Que durante pequeños intervalos detiempo, hay una suerte de corte en la visión del futbolista. En el caso de los arqueros, lo que genera este efecto es la pérdida de la noción de la trayectoria de la pelota, por solo poner un ejemplo.
¿Por qué se utilizan lentes estroboscópicos en los arqueros? El principal objetivo del uso de estas gafas es que los arqueros logren localizar el objetivo (en este caso, la pelota) sin depender exclusivamente de la información visual. Esto permite una toma de descisiones más rápida y potencia la capacidad de reacción y concentración. Todos elementos que se miden y estudian a través de la neurociencia. Y que en River, con la llegada de Sandra Rossi, se transformó en una herramienta fundamental.