Minutos fatales para River en Tucumán. Mateo Goronel desparramó a Maidana en el área y puso el 1-0. Parecía que lo iban a anular por una falta a Palavecino, pero el VAR convalidó el tanto. River se fue de su eje y en especial el que quedó desencajado fue José Paradela, extraño en él.
El ex Gimnasia protestó primero una pelota que se había ido al lateral (el jugador de Tucuman la llegó a puntear antes de que se fuera en su totalidad). Le gesticuló de más al árbitro Rapallini y se ganó la amarilla, siguiendo la nueva recomendación de los árbitros.
De ese tiro libre, porque el 26 había cometido falta luego de que el jugador de Atlético Tucumán salvara la pelota, Paradela fue sin miramientos y repleto de bronca a recuperarla una vez que estuvo en juego y le dejó el codo arriba a Joaquín Pereyra. Rapallini le sacó la segunda amarilla y lo expulsó. Una irresponsabilidad total del mediocampista, sin sentido alguno. Por esta roja, la segunda en su carrera, se perderá el superclásico.
