Cómo le fue a River de visitante en la Copa de la Liga

Lento, espeso, previsible, con notorias carencias para generar juego. Así fue gran parte del partido de River en La Plata frente a Gimnasia. Después de lo que había sido la sólida goleada sobre Independiente, el Millonario volvió a retroceder sobre sus pasos y a dejar una muy fea imagen jugando fuera del Monumental, como ya le pasó en varias ocasiones en este campeonato.

Con una mezcla de orden e intensidad, Gimnasia lo hizo parecer un equipito en el Bosque y lo obligó a equivocarse reiteradamente. Más allá de que River puede tener un mal partido como todos los equipos del torneo, lo que preocupa y molesta a los hinchas es que casi siempre las malas presentaciones se dan lejos de Nuñez. Eso sí, en una ráfaga de fútbol el equipo logró dar vuelta el cotejo y quedarse con los tres puntos.

Basta con repasar los números para notar que River, pese al triunfo, estuvo teniendo falencias futbolísticas cuando le toca jugar con el público de su club rival. El de Gimnasia fue su sexto partido de visitante en la Copa de la Liga y recién el segundo en el que pudo imponerse.

Ya le había ganado a Boca en La Bombonera (no fue cualquier partido, claro está), y en el resto siempre fue menos que su rival en el trámite del juego. Perdió con Argentinos en el debut, cayó ante Vélez en la tercera fecha, empató con Banfield en la sexta, empató con Colón en la octava y ahora logró sonreír frente al Lobo.