Luego de eliminar al eterno rival en la Libertadores, Gallardo destacó la ferocidad con la que los jugadores disputaron ambos Superclásicos coperos y analizó las fortalezas del equipo.
Es inevitable. Si bien River se encuentra en la antesala del duelo revancha frente a Cruzeiro, nadie puede olvidar el bochorno histórico generado por los hinchas de Boca, en la Bombonera. Sin embargo, Marcelo Gallardo prefiere dejar el incidente en el pasado y enfocarse en temas estrictamente futbolísticos.
Por eso, el Muñeco habló de los Superclásicos coperos y elogió la actitud de los jugadores: “El mérito de River fue haber agredido a Boca en el Monumental. Sometimos a un equipo que venía paseando en la Copa y en el torneo. Desde ahí comenzamos a ganar la serie”.
“Yo tengo un tipo observación personal en cuanto a los momentos. Analizo a los jugadores, el equipo y la circunstancia del rival. A priori, Boca era superior a nosotros, pero ellos no nos superaron en ningún momento. Hicimos un gran trabajo, en dos partidos no nos patearon más de tres veces al arco”, agregó el técnico, en diálogo con Estudio Fútbol.
En cuanto al presente futbolístico del plantel, Gallardo aseguró: “Yo me voy acomodando de acuerdo con lo que veo. Nosotros seguimos manteniendo lo nuestro, intentando hacer foco en nuestras fortalezas”.
“Los tiempos nunca son los mismos, uno tiene que ir reinventándose. A todos nos gustó el River que vimos en el 2014. Atacábamos en conjunto y hacíamos lo mismo defensivamente. Esa dinámica nos permitió jugar en función de equipo y a través de ahí se potenciaban las individualidades. Cuando no se puede, hay que buscar nuevas armas”, sostuvo el exjugador del Millonario.
Luego, el Muñeco analizó las dificultades ante la falta de recambio: “No tenemos un plantel numeroso, pero nosotros seguimos siendo constantes. Los chicos entendieron lo que nos estábamos jugando. Driussi se convirtió en una pieza fundamental, pero ahora no podemos contar con él por enfermedad. Por eso, tenemos que reinventarnos todo el tiempo”.
“La idea no cambió, pero nos tuvimos que reacomodar. Yo veo todos los días a los jugadores y cuando bajan el nivel hay que intentar de buscar otro camino”, concluyó.
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