(Santa Fe – Enviado especial) River no pudo aprovechar su buen segundo tiempo para romper el cero en el Cementerio de los Elefantes, donde empató 0-0 con Colón y se despidió de la posibilidad de clasificarse a la próxima Libertadores mediante la tabla de posiciones. Tampoco está en zona de acceso a la Sudamericana, pero debe jugar un partido pendiente.
La frustración es enorme. River ya quedó matemáticamente al margen de la clasificación a la siguiente edición de la Copa Libertadores. Si bien es cierto que todavía hay tres variantes que le pueden otorgar un lugar -obtener la Copa Argentina por tercera vez al hilo, repetir la conquista del año 2015 o terminar sexto y aguardar que un club argentino levante el trofeo más importante de América-, la realidad indica que en este momento ni siquiera tiene una plaza garantizada para entrar a la Sudamericana 2019 porque está 12°, aunque con un compromiso pendiente el jueves que viene frente a Estudiantes de La Plata. Por lo pronto, esta noche igualó 0-0 contra Colón, en Santa Fe. Allí tuvo un inicio preocupante y luego mejoró al punto de estar varias veces cerca de la apertura del marcador.
Sin embargo, el Millonario sintió la ausencia de su base titular. Sobre todo durante la etapa inicial, cuando sufrió demasiado al principio. De hecho, el Sabalero -quedó expuesta la falta de un 9 natural- desperdició algunas chances claras para ponerse en ventaja. Le faltó puntería luego de desbordar a Marcelo Saracchi, de pobre actuación. Marcelo Gallardo les dio descanso a muchos de sus protagonistas, por eso el funcionamiento colectivo padeció problemas en la primera parte. El equipo fue muy largo tanto para la elaboración, con distancias de hasta 25 metros, como en el repliegue. Los volantes locales manejaron la pelota y cortaron los circuitos de un River impreciso, especialmente cuando buscó profundizar mediante pases largos. Aunque mostró algo de circulación de a ratos, llegó poco y tampoco tuvo éxito en la resolución.
El panorama cambió completamente en el segundo tiempo. La entrada de Juan Fernando Quintero en reemplazo de un Gonzalo Martínez apagado permitió que El Más Grande asumiera el dominio. River mantuvo la rotación de sus mediocampistas ofensivos para quitarle referencias a Colón, pero mejoró en la creación porque hubo más cercanía para armar juego. El colombiano aportó visión, inteligencia y la dosis imprescindible de eficacia en la entrega. Además, brindó tiro de media distancia: exigió al arquero Alexander Domínguez y también a la defensa, que le llegó a desviar en esos remates, incluyendo uno que dio en el poste derecho. Pese a que habilitó tanto a Ignacio Scocco como el ingresado Rafael Borré, ninguno de los dos definió con la fuerza y dirección necesarios.
Más allá del crecimiento en el complemento, River no logró romper el cero. Colón tampoco supo aprovechar sus chances y, como ya es habitual, Franco Armani transmitió seguridad, incluido un disparo que le tapó a Gustavo Toledo. El Millonario se quedó sin clasificación a la Libertadores. Todavía no se metió de nuevo en zona de acceso a la Sudamericana. Cortó una racha de seis triunfos consecutivos en la Superliga, donde está pagando la doble competencia que tantos puntos le hizo ceder en el semestre pasado, así coml también el flojo inicio en este año. Ahora, a pensar en Estudiantes y San Lorenzo para al menos entrar en el otro certamen continental.
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