La nueva semana de Copa Libertadores confirmó tres clasificaciones a octavos de final de equipos argentinos a falta de una fecha para el cierre de la fase de grupos, cuando en la previa se creía que los conjuntos de nuestro país podían sufrir el letargo de tanta inactividad y de no haber arrancado la liga local como ocurrió en el resto de los países. River, Boca y Racing ya tienen su lugar entre los 16 mejores del continente, y es por esto que el mundo del fútbol ya está a la expectativa de un nuevo Superclásico a futuro.

¿Cuáles son las posibilidades para que River y Boca se puedan cruzar en la próxima instancia? Lo primero que vale aclarar es que para que eso suceda uno de los dos equipos deben terminar primero en su grupo y el otro en segundo lugar. De esta manera, básicamente se podría decir que depende solamente de la suerte del equipo de Marcelo Gallardo en la última fecha ante Liga de Quito, porque los Xeneizes ya matemáticamente serán primeros en su zona, pase lo que pase cuando enfrenten a Caracas en el próximo partido.

Pasando en limpio, si River le gana a los ecuatorianos en el estadio de Independiente terminará primero en el grupo, por lo que se anularán por completo las chances del cruce Superclásico en octavos. Pero si el Millonario empata o pierde irá al bombo de los segundos, y allí desde los números existirá un 12,5% de chances que en el sorteo de octavos el rival sea Boca.

La última vez que chocaron en esa instancia fue en la edición 2015, donde Boca llegaba como el mejor de los primeros y River como el peor de los segundos. El equipo del Muñeco se impuso 1-0 en la ida con un penal de Carlos Sánchez, y el partido de vuelta fue muy recordado luego del ataque provocado por la hinchada de Boca con gas pimienta contra los jugadores y cuerpo técnico Millonario.

Cabe destacar que el sorteo se desarrollará el sábado 24 de octubre en Paraguay y allí, como suele ocurrir en los últimos años, se conocerán no solo los octavos de final, sino que además quedarán establecidas todas las llaves y los cruces de la Libertadores hasta la final. Los mejores ubicados en la tabla general por la ubicación y los puntos obtenidos en la primera ronda definirán cada serie como local en el partido de vuelta, y la final se jugará nuevamente a partido único en estadio neutral.