Mammana se mostró satisfecho con su rendimiento frente a Unión, aunque dejó en claro su objetivo principal era que River lograra una victoria.
Por quinta vez oficial, Emanuel Mammana vistió el manto sagrado. De buen nivel, rápido para los cruces e inteligente a la hora de resolver cada inconveniente en su zona, cumplió un papel interesante el domingo pasado.
“Tuvimos un gran primer tiempo. Por ahí nos dormimos bastante en el segundo. Nos quedamos, ellos lo aprovecharon y nos empataron el partido”, analizó el marcador central, ayer, en rueda de prensa.
Con respecto a lo personal, Mammana fue ambiguo: “La verdad que me gustó cómo jugué, lástima que no se pudo ganar. Creo que hicimos bastante bien las cosas atrás con Eder. Al empatar el partido, no te vas contento”.
Sin embargo, el defensor de 19 años agradeció la confianza que le transmitieron los integrantes del cuerpo técnico: “Me dan mucha tranquilidad, me piden que juegue como sé yo y que dé lo mejor de mí”.
