(Santa Fe – Enviado especial) El delantero de River fue ovacionado por los hinchas de Colón, quienes recuerdan con cariño su importancia en varios momentos clave. Además, fue condecorado por la dirigencia.

Es difícil ser local cuando la casa es ajena. Sobre todo desde la ausencia del público visitante. Sin embargo, Lucas Alario logró sentirse como en su hogar esta noche. Cuando la voz del estadio, a cargo de una mujer dio a conocer ambas formaciones, surgió una catarata de aplausos para el número 13 de River.

Con 12 goles, muchos de ellos determinantes, en 60 presentaciones oficiales, el Pipa dejó un grato recuerdo en el Sabalero. Allí surgió a mediados de 2011. En julio pasado fue transferido a River. El club de Núñez pagó $ 10.908.000 por el 30% del atacante -hay opción por otro porcentaje similar-, cuyas conquistas también dieron varias alegrías para la gente del Más Grande.

Lo cierto es que Alario se mostró feliz en su regreso al estadio Brigadier General Estanislao López. En este caso vistiendo el manto sagrado, aunque empezando en el banco de suplentes porque Marcelo Gallardo decidió preservarlo y darle pista como titular al uruguayo Iván Alonso.