Marcelo Gallardo tuvo otra inexplicable decisión ante Racing: otra vez puso a Matías Galarza Fonda. Si bien llegó en el último mercado de pases, el paraguayo ya demostró que la camiseta le queda enorme. Aún así, entró nuevamente en un partido clave y por un grosero error suyo, River perdió en Avellaneda. ¿Por qué entró?
El volante de 23 años reemplazó a Nacho Fernández a los 27 minutos del complemento. Gallardo, que ya había hecho tres cambios y que le habían dado resultado, agotó variantes al meter a Galarza Fonda y Juan Portillo. También salió Enzo Pérez.
El cambio sonaría lógico: pieza por pieza, mediocampista zurdo por mediocampista zurdo. Claro, si no se tratara de un futbolista displicente, que no le aporta nada al equipo y que comete errores infantiles. Como querer controlar de pecho dentro del área, estando de espaldas. Cualquier opción parecía mejor que el ex Talleres y Goiás.
“Jugadores jóvenes y frescos para reemplazar a dos jugadores que vienen dando mucho y en el partido lo venían sintiendo. No, porque estaban pidiendo el cambio, se sabía que estaban en un partido de intensidad y dinámico, teníamos muy analizado que les iba a dar para 60 o 70 minutos”, explicó Gallardo en conferencia de prensa.