Pasaron casi dos años de la salida de Lucas Alario de River y la herida en Núñez sigue abierta. El delantero fue fundamental en el tiempo que le tocó jugar con el equipo de Marcelo Gallardo: convirtió 41 goles en 82 partidos oficiales y obtuvo cuatro títulos (uno local y tres internacionales).

 

El Pipa se ganó el cariño de los hinchas del Más Grande por todo lo que hizo como futbolista en muy poco tiempo. Sin embargo, a mediados de 2017, el hombre que marcó tantos en las finales de la Copa Libertadores 2015, Recopa 2016 y Copa Argentina 2016 tomó la decisión de marcharse a Bayer Leverkusen a pocos días de que finalizara el mercado y semanas antes de que el Millo juegue los cuartos de final de la Copa ante Guaraní.

Pero, ¿qué influyó en la decisión de Alario? Pedro Aldave, agente del delantero, dio algunos detalles sobre cuáles eran las pretensiones del santafesino: "El jugador tenía una cláusula. Lucas se quería ir. Ese año (NdeR: el 2017) no fue bueno para River, él venía de diez partidos sin hacer un gol. En River dejó una fortuna por su venta. Él había cumplido un ciclo, con 24 años quería triunfar en Europa. Él le había dicho que no a China y era más plata. El problema fue que se fue pocos días antes de que cerrara el libro de pases. Driussi se fue antes y nadie dijo nada. Con el diario del lunes, yo creo que nadie habría pagado la cláusula de rescisión que tenía en River. Hubiera sido difícil. Lo que no fue justo es que el libro de pases justo estaba cerrando. La realidad fue el timing, la operación fue perfecta".

En aquel entonces, muchos afirmaban que si Alario se iba de River le costaría adaptarse a un nuevo equipo y eso le quitaría chances de ser convocado a la Selección Argentina para disputar el Mundial de Rusia. Aun así, Aldave dejó en claro que el atacante jamás se vio con buenas chances de ser considerado en la Albiceleste.

"La Selección Argentina nunca le dio la chance, jugó tres partidos, metió un gol en una gira en Asia (NdeR: contra Singapur), jugó unos minutos en las Eliminatorias contra Venezuela y frente a Uruguay. La Selección no le dio la oportunidad ni a él ni a Benedetto. En la Selección fue difícil que jugara, en ese momento jugaban Aguero, Higuaín... Ahora quizás podría ir a la Selección para quedarse, pero sino era como para llevarlo. Después empezó el descontrol porque empezaron a convocar a Meza... La realidad es que lo llevaron tres veces, no era un fijo, lo pusieron de volante, de lateral... Nunca le dijeron 'tomá, vos sos el 9'. Hubo otro partido de Brasil en el que no jugó ni un minuto. Lo de la Selección fue un mito. Si ahora mete varios goles va a estar en el radar de Scaloni. En Argentina es complicado jugar y la verdad que el fútbol europeo es mucho mejor que el local", sostuvo el agente de Alario en una charla con LPM Radio.

"Él no se veía en la Selección, más allá de que era convocado, ni siquiera cuando le iba muy bien en River y era goleador. No había muchas chances. Estaban Higuaín, Aguero, después pusieron a Benedetto y a él casi que no se la dieron", añadió.

 

En tanto, el representante explicó que también hubo detalles extrafutbolísticos que hicieron que la salida de Alario no fuera la mejor: "Cada uno defendía lo suyo. River estaba en un año de elecciones y se estaban por jugar los cuartos de final de la Libertadores. El presidente no lo quería dejar ir y cada uno defendía su postura. Fue un año en el que estuvo el caso del doping de Mayada y Martínez Quarta.Se hablaba de que Lucas no podía pasar una revisión médica, conseguimos este club que ponía la plata y estaba de acuerdo en cómo estaba su rodilla. Fue un cambio económico importante y estaba la cláusula de rescisión".

Por otra parte, Aldave reconoció que hubo un error en torno a la foto que se filtró de Alario con la camiseta de Bayer Leverkusen antes de que se diera a conocer la noticia del traspaso: "Él ya había firmado en ese momento, pero lo agarró la prensa del club y no sé cómo se filtró esa foto.El abogado de Colón y uno que estaba ahí atrás de donde sacaron la foto sacó la foto y después la publicaron. No era la forma, pero ya estaba dado el paso. No era una presión para River".