Luego de que fueran allanadas su casa y su oficina tras las denuncias efectuadas desde la institución de Núñez, el expresidente aseguró que no tiene ninguna responsabilidad en los hechos que lo acusan y hasta cuestionó a la nueva Comisión Directiva: “Estos dirigentes me señalan directamente a mí”, se molestó.
La noticia estalló cerca del mediodía. Conocida la denuncia por parte de la nueva dirigencia millonaria, Daniel Passarella recibió la visita de la policía en su casa de Lomas de San Isidro y en su oficina en Capital Federal, donde fueron a buscar pruebas para la investigación por administración fraudulenta.
Horas después, el exmáximo directivo que cesó de su cargo a fines del 2014 se mostró muy sereno y aseguró: “Estoy muy tranquilo. No tengo nada que ocultar”.
Pero sus palabras continuaron. En declaraciones a Clarín, Passarella contó sus sensaciones por el arribo de la policía a sus domicilios: “Me llamó la atención todo el operativo. Esta es una persecución. No encontraron nada. Les abrí todos los cajones. Revisaron cada rincón de mi casa y no hallaron nada”, contó.
Finalmente, le apuntó a la nueva Comisión Directiva: “Cuando nosotros denunciamos a la gestión anterior, no le apuntamos a nadie. Pero estos dirigentes me señalan directamente a mí”, concluyó.