(Incluye estadísticas) El mediocampista uruguayo tuvo un despliegue enorme y fue el jugador más regular frente a Unión, al punto de haber encabezado los ataques en los minutos finales.
No tiene un hermano gemelo. Ni siquiera cuenta con capacidad de teletransportarse. Sin embargo, Camilo Mayada parece omnipresente. Puede avanzar por la banda derecha, donde estuvo su punto de partida, o sorprender por el costado izquierdo. Al igual que su compatriota Carlos Sánchez, posee un físico privilegiado que le da un plus para correr en el último minuto como si se tratara del primero.
Si bien River no pudo aprovechar al máximo las cualidades de Cienfuegos, el apodo con el que se lo conoce del otro lado del Río de La Plata, el rendimiento al menos sirvió como una carta fundamental a futuro. Es que el volante charrúa reunió un cóctel lujoso: claridad en velocidad para ser el jugador más peligroso del Millonario cuando la necesidad de ganar nublaba las ideas.
Más allá de la bronca por el triunfo desperdiciado, Mayada se ganó el aplauso de los hinchas, quienes expresaron su entusiasmo por lo que hizo el ex-Danubio. Responsable de una gran acción para el desborde de la última oportunidad, en la que Rodrigo Mora y Fernando Cavenaghi se molestaron mutuamente, dejó en claro que puede ser la primera pieza de recambio. Por ejemplo, en el sector izquierdo, donde Ariel Rojas se encuentra bajo.
+ El partido de Mayada, bajo la lupa de DataFactory