(Asunción – Enviado especial) Desde que asumió Gallardo, River ganó sus nueve instancias decisivas en tres certámenes internacionales e incluso perdió apenas uno de sus 18 compromisos.

El Más Grande parece invencible cuando hay que jugar a todo o nada en ida y vuelta. Con Marcelo Gallardo como técnico ganó siempre. Ni siquiera requirió una definición por penales o apelar al gol de visitante como instrumento extra ante igualdad de puntos y goles. Una síntesis de lo poderoso que es este equipo de River, cuya mentalidad es 100% ganadora.

La historia del Muñeco en series internacionales dirigiendo al Millonario es perfecta, entre Copa Sudamericana, Recopa y Libertadores. Realmente impecable. Consiguió la victoria en 13 de los 18 encuentros, empató cuatro -todos ellos como visitante- y tan sólo perdió frente a Cruzeiro, en el Monumental.

Godoy Cruz, Libertad, Estudiantes de La Plata, Boca – #DosVecesEnSeisMeses-, Atlético Nacional, San Lorenzo, el mencionado Cruzeiro y Guaraní padecieron la capacidad de River para vulnerar y desarticular adversarios. De hecho, a excepción del eterno rival, La Banda le sacó al menos dos goles de distancia a todos los equipos, dejando en claro que sabe administrar resultados, revertirlos e incluso preservarlos.

River tiene un plantel multicampeón que quiere la gloria. Desea cortar una racha de 19 años sin ganar la tan anhelada Libertadores. Ya está en la final. Esta vez sufrió más de la cuenta por momentos, pero logró su meta nuevamente. Ahora debe esperar por Tigres o Inter de Porto Alegre. El primero le permitirá definir en el Monumental; en cambio, el otro lo hará terminar el certamen en Brasil. Por lo pronto, pase lo que pase, el Millonario se recibió de master en series internacionales.

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